Cruz Azul hizo lo que tenía que hacer. Demostró su supremacía contra el débil y modesto Arcahaie de Haití, al que goleó por 8-0, para anotar su nombre en los cuartos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf.
Simple, sin exageraciones, plasmó la diferencia entre el mejor equipo de la Liga MX con el conjunto haitiano que padeció para llegar al duelo de vuelta.
No se esperaba menos de La Máquina, que si bien se mostró apagado, displicente y muy gris hace ocho días en República Dominicana –territorio donde se jugó la ida–, nunca puso en peligro su boleto a la siguiente fase del torneo.
Eso sí, la oleada de críticas luego del infumable empate sin goles en la ida, seguramente provocó que Juan Reynoso apretará las tuercas y exigiera más de sus segunda línea, la que debería estar ávida de más minutos de juego.
Y eso quedó constatado. Con un poco más de actitud Cruz Azul pasó por encima. Apenas a los 2 minutos Alexis Gutiérrez abrió el marcador, luego de un grosero error del portero que soltó un centro de rutina.
Al 10’ llegó el segundo, ahora en un buen centro de Elías Hernández, quien encontró a segundo poste a Yoshimar Yotún, quien la mandó a guardar.
Al minuto 24 fue el propio Elías quien dejó una postal con un soberbio remate de volea.
El juego estaba totalmente liquidado, pero no fue si no hasta el segundo tiempo que el fondo físico se le terminó al Alcahaie y se vino la goleada. Comenzando el complemento, un error entre la defensa y el portero, provocó que Santiago Giménez robara la pelota y se la pasara a Walter Montoya para el 4-0 al minuto 49.
Para el 61’ el canterano Josue Reyes encontró el quinto, luego de una gran jugada de Giménez, quien se quitó a tres defensores. El partido estaba roto y cada llegada de La Máquina parecía un gol seguro. Se volvió una prueba de tiro.
Al minuto 64, otra vez Montoya se hizo presente, de nuevo asistido por Giménez; cinco minutos después, Bryan Angulo, recién ingresado, se anotó a la lista de goleadores. Al 76’ Juan Escobar le dio forma la inmisericorde goleada de 8-0.