Con 20 años de carrera a sus espaldas y tras arbitrar el Mundial femenino de Francia en 2019, la árbitra brasileña Edina Alves se ha ganado un lugar en la historia del fútbol.
Es la primera árbitra seleccionada por la FIFA para pitar un partido en un campeonato internacional masculino, el Mundial de Clubes, que se disputa en Qatar.
El Diario el País de España presentó la siguiente nota sobre Edina:
Debutó como el cuarto árbitro en el partido entre los Tigres, de México, y el Ulsan Hyundai surcoreano. Dos mujeres más, también latinoamericanas, actúan como árbitras asistentes. La también brasileña Neuza Back y la argentina Mariana de Almeida.
“Si pienso en mi carrera, claro, es una victoria única, pero conmigo están miles de mujeres que luchan por vencer en la vida, en sus profesiones”, declaró al diario Folha de S.Paulo hace unos días desde Qatar, adonde viajó con antelación para hacer cuarentena antes de la Copa. La FIFA ha ido incorporando mujeres a sus cuadros arbitrales en los últimos años. Ya han participado de la Copa femenina y de mundiales masculinos en las categorías inferiores.
Ser árbitro nunca fue un paseo para ellas, tampoco para ellos. Ni siquiera en los partidos playeros. Por eso, Alves es perfectamente consciente de su responsabilidad ante millones de niñas, de los aficionados y de los directivos de la FIFA. “No es fácil ir por delante porque (lo que hagas) puede salpicar a quien viene detrás. Si lo haces mal, todo se desmorona. Todos dirán ‘oh, las mujeres no aguantan’ o ‘las mujeres no son capaces”, explicó en la citada entrevista esta mujer que ha arbitrado una decena de partidos en Primera.
Back y Alves forman hace años equipo en el país que alumbró al rey Pelé y a la reina Marta. El verano pasado el dúo de brasileñas participó en la Copa del Mundo femenina de Francia. Arbitran y entrenan juntas en São Paulo. Fueron seleccionadas tras las pertinentes pruebas físicas.
La noticia les pilló en el coche. Regresaban de un entrenamiento cuando sonó el móvil de Alves. Era un directivo de la Federación Brasileña de Fútbol que llamaba para decirles que iban al Mundial. “En el primer instante, pensé que era algo femenino… solo luego me di cuenta. Me emocioné, me pasó toda la película por la cabeza. Bajamos del coche, Neuza me abrazó. Trabajar en una competición masculina era uno de nuestros objetivos”, explicó Alves a Dibradoras (regateadoras, en portugués).
Roberta Nina, una de las fundadoras de este medio digital que cubre el deporte femenino brasileño, detalla en un mensaje el contexto porque Alves no es la pionera en el arbitraje, sino Sílvia Regina de Oliveira en los años 2000. “Brasil fue uno de los países pioneros al tener una árbitro pitando en la primera división nacional del fútbol masculino (Serie A) en 2006, pero después de eso, estuvimos 14 años sin ninguna otra mujer que repitiera la hazaña. Quien lo logró fue precisamente Edina Alves, en 2019”, explica Nina.
De niña, el idilio de Alves era con el balón. Jugaba a fútbol sala, a baloncesto… lo que fuera con pelota. “El fútbol once era más difícil porque en aquella época no había niñas suficientes para montar un equipo, pero hacíamos equipos mixtos”, añadió la árbitra.
Pero pronto asumió que su vocación no era marcar ni parar goles. Sabía que quería ser árbitra, pero la historia, la tradición, el ambiente… le frenaron. En la liga del Estado de Paraná, donde nació, estaba capacitada para arbitrar y ser asistente, pero solo ejercía de titular en los partidos femeninos y masculinos de base; en los de adultos, se quedaba como jueza de línea. Decidió asumir en ese papel secundario cuando se incorporó a las filas de la federación nacional. Pero en 2014 cambió de idea, fue a por todas con su vocación inicial. El empujón se lo dio Back, que desde hace años ejerce de asistente.
Pero tuvo que empezar desde cero. Su amplia experiencia como linier en la primera división de Brasil no valía para dirigir partidos. Ya instalada en la élite y con las miras puestas en la FIFA, tuvo que iniciar la formación para convertirse en árbitra. Recalca la cofundadora de Dibradoras que el 10% de todas las personas oficialmente preparadas para dirigir o ser juez de línea en partidos de la confederación brasileña de fútbol son mujeres, “así que queda mucho por avanzar”. Pero este otro techo de cristal roto. Millones de espectadores verán una mujer entre los árbitros de un Mundial de Clubes.
Fuente: Diario El País España