El Chelsea superó la noche de este martes al Espérance de Tunis (0-3) y se medirá al Benfica en los octavos de final del Mundial de Clubes.
En un partido con poco juego y demasiadas rotaciones, Tosin Adarabioyo y Liam Delap sacaron las castañas del fuego al filo del descanso. La sentencia, de Tyrique George al 97'.
Desde el primer minuto los londinenses impusieron su estilo con una presión alta y posesión dominante, obligando al equipo contrincante a replegarse en su campo.
Esperance intentó reaccionar por medio de balones largos y transiciones rápidas, pero se topó con una defensa bien organizada liderada por Wesley Fofana y un Enzo Fernández que manejó el medio campo con autoridad y, por si fuera poco, concretó dos asistencias.
El primer gol llegó justo antes del descanso gracias a una gran jugada colectiva finalizada por Tosin Adarabioyo, quien sigue consolidándose como uno de los jugadores clave del conjunto.
Chelsea amplió su ventaja al instante con un remate preciso de Liam Delap, tras una recuperación en zona alta. Los goles consecutivos derrumbaron al equipo africano. El marcador 2-0 al medio tiempo reflejó con justicia el dominio absoluto del conjunto dirigido por Enzo Maresca.
En el segundo tiempo, el Espérance buscó mayor protagonismo con el ingreso de jugadores ofensivos, pero su esfuerzo fue neutralizado por la experiencia de los europeos, que manejaron los tiempos del encuentro sin sobresaltos.
Un tercer tanto, obra de Tyrique George, sentenció definitivamente el compromiso en el tiempo agregado. Chelsea no solo fue eficaz al frente, sino que también mostró solidez defensiva que le permitió mantener su arco en cero.
Con este resultado, el combinado de Londres avanzó con paso firme a la siguiente ronda del Mundial de Clubes, donde enfrentará al Benfica. Por su lado, el Espérance se despide del torneo con la sensación de haber sido superado por un rival de mayor jerarquía.