El argentino Éver Banega, compañero del costarricense Keylor Navas en Newell's, vivió duros momentos durante su infancia en Rosario.
Con esfuerzo y apoyo logró convertirse en futbolista profesional.
"Sólo nos faltó comer barro mojado", dijo el futbolista en una entrevista publicada tiempo atrás por el diario El País. "Hasta que empecé a jugar como profesional a mi familia no le alcanzaba para comer y había que adaptarse a cualquier cosa", añadió.
"Me críe en un ambiente duro, incluso compartía los botines con mis hermanos mayores. Luciano jugaba a la una, César a las tres y luego iba yo".
"En mi barrio había mejores jugadores que yo, pero ahora están presos. Si estoy aquí es gracias a mis padres. Nunca me dejaron solo", concluyó.
Éver Banega tiene 32 años de edad. Hizo una extensa carrera en el exterior pasando por España, Italia y Arabia Saudita. Fue mundialista con la Selección mayor de Argentina en Rusia 2018.