La Juventus de Turín empató el sábado ante el Bolonia por 2-2 en un partido donde Thiago Motta no pudo terminar de verlo desde el banquillo tras una cruzada de cables que le costó la expulsión.
Con la tensión de verse detrás en el marcador al comienzo de la segunda parte, el técnico italiano se terminó desesperando por las decisiones del colegiado hasta que terminó por estallar.
En una presión de conjunto turinense cometieron una falta de ataque a Dan Ndoye que fue castigada además con tarjeta amarilla.
Fue en ese momento mientras la enseñaba que apareció un balonazo que fue directo a la cabeza pero que solo terminó impactándole en su brazo derecho con la que mostró después la roja directa a Motta. Ni siquiera la protestó y se marchó por el túnel de vestuarios mientras miraba con rostro serio al arbitro, que estaba explicando a los jugadores de la Juventus qué es lo que había ocurrido.
Pocos segundo después el Bolonia anotó el segundo pero la Juventus terminó empatando más tarde el partido gracias a un agónico gol en el descuento que rascó un punto en casa, que tampoco anima mucho el ambiente en Turín.
Thiago Motta se pierde con la Juventus
Ya son tres empates consecutivos en liga y actualmente son sextos en la clasificación, puesto de Conference League, y a siete puntos del líder Atalanta.
Una distancia que se antoja muy complicada de recuperar cuando todavía faltan seis meses de competición. Porque no es solo el elevado número de lesiones que ha mermado indiscutiblemente su buen hacer, es que es un equipo que ha perdido mucha confianza por el camino, que ha perdido buena parte de su identidad. Ya no tan sólido atrás como en el inicio.
La 'Juve', que no gana en Serie A desde hace un mes, la pelea por el 'Scudetto' está cada vez más lejos. Los puestos 'Champions' son el objetivo.
— Out Of Context Football (@nocontextfooty) December 8, 2024