La Selección de Colombia, al mando del entrenador argentino Néstor Lorenzo, se enfrentará el próximo viernes ante Costa Rica por la segunda fecha del grupo D de la Copa América.
Los ticos vienen de dar la sorpresa al igualar en la primera jornada sin goles frente a Brasil.
Néstor no quiere sorpresas y respeta al conjunto centroamericano.
Recorrido de Lorenzo
Mientras José Pekerman, ex entrenador argentino de Colombia, guiaba como un padre a una generación histórica de seleccionado cafetero, su asistente Néstor Lorenzo aprendía. Ahora el alumno y heredero del estilo está al frente de la selección cafetera, encaminada a ser protagonista en la Copa América Estados Unidos-2024.
Entre 2012 y 2018 la dupla argentina, conformada por una institución del fútbol sudamericano y su principal escudero, fue artífice de los que se recuerdan como algunos de los mejores años del combinado nacional, que por primera vez llegó a unos cuartos de final de un Mundial en Brasil-2014.
Pekerman se marchó dejando huérfanos de su amor y protección a James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado, Radamel Falcao García y otras estrellas que se consideran sus hijos.
En 2022 la federación, en caos durante la era post Pekerman, decidió retomar esa senda al designar como entrenador a Lorenzo, aquel aprendiz que aparecía siempre unos pasos detrás de su maestro vistiendo los mismos colores del traje y corbata.
Pese a su corta experiencia como DT, desde que asumió no ha perdido en 19 partidos gracias a una fórmula: conformar una familia que anhela conseguir la segunda Copa América para Colombia.
“Estamos en un proceso donde el armado del grupo y la conciencia de selección fue fundamental desde el inicio, los jugadores lo saben”, dijo el entrenador de 58 años en una conferencia de prensa reciente.
Lorenzo y sus muchachos enfrentarán en la fase de grupos a Brasil, Paraguay y Costa Rica.
El “número uno”
Pekerman y Lorenzo tienen en común el haber sido formados en Argentinos Juniors, alma mater de grandes futbolistas y entrenadores de ese país.
En 2000, dos años después del retiro como futbolista, Lorenzo se unió oficialmente al cuerpo técnico de su mentor en la Sub-20 albiceleste. Luego lo siguió a la selección de mayores, a los mexicanos Toluca y Tigres y finalmente Colombia.
“Sin duda que José me ha enseñado mucho, aprendí mucho de él, el estilo puede llegar a parecer el mismo”, dijo Lorenzo en 2022.
Cuando Pekerman salió de la Selección Colombia tras el Mundial de Rusia-2018 separaron sus caminos y Lorenzo tuvo un breve pero exitoso paso por el Melgar de Perú.
Justo en ese momento, la selección colombiana era un barco a la deriva que había perdido a su capitán. El portugués Carlos Queiroz reemplazó a Pekerman sin pena ni gloria y luego Reinaldo Rueda no logró clasificar al Mundial de Catar-2022.
Para recomponer el camino, Colombia echó mano del recuerdo glorioso de Pekerman, quien llegó a ser considerado un ídolo nacional con reconocimientos del Estado, a través de su asistente.
Lorenzo “fue mi colaborador numero uno”, reconoció Pekerman en una entrevista con Directv Sports.
“Afortunadamente reencontró el camino (…) lo ha encauzado ahora con una generación que se fue encumbrando, que ha crecido mucho, en equipos europeos donde tienen muy buena participación”, agregó.
También Bilardo
Antes de ser la mano derecha de Pekerman, Lorenzo conquistó a otra leyenda del fútbol argentino: el campeón del mundo en 1986 Carlos Salvador Bilardo.
El historiador Luciano Wernicke, como parte de sus investigaciones para libros, descubrió el momento en el que el defensor central se ganó el aprecio de uno de los entrenadores más respetados de la historia.
En 1990, Lorenzo no podía ingresar a Reino Unido para una concentración con Argentina por un problema de pasaporte tras la guerra de Malvinas.
En el aeropuerto de Glasgow “comenzó a gritar y a llorar”, cuenta Wernicke a la AFP, hasta que convenció a los funcionarios migratorios para que lo dejaran ingresar. Al ver su reacción, Bilardo decidió que sería uno de sus primeros convocados del Mundial de ese año, en el que resultó jugando la final ante Alemania.
Recordado más por su actitud combativa y no precisamente por ser un jugador técnico, Lorenzo ha intentado imprimir esa pasión por su propio país a los jugadores de Colombia, a quienes les insiste que no deben amedrentarse ante ningún rival.
“Ellos (el cuerpo técnico de Pekerman y Lorenzo) iban para adelante siempre, nunca tenían temor de nada (…) ellos trataron de imprimir eso, de llenarnos de confianza”, contó el exmediocampista Abel Aguilar al portal Cambio.
La idea es hacer que el buen fútbol que caracteriza al fútbol colombiano sea “más agresivo” y “más intenso”, explica Lorenzo.
El Deportivo.com - Colombia