Este domingo el Bayer Leverkusen evitó la primera derrota de la temporada y empató 1-1 ante un rival directo como es el Stuttgart.
Chris Fuhrich abrió la cuenta en el minuto 40 de partido, mientras que Florian Wirtz rescató a los de Xabi Alonso nada más comenzar la segunda mitad.
No rentabilizó todo lo deseable el varapalo sufrido por el Bayern Múnich en Frankfurt, ante el Eintracht, el sábado. Goleado el campeón (5-1), el cuadro de Xabi Alonso disponía en el MHP Arena de una buena ocasión de ampliar la ventaja en la cima de la tabla y distanciar al conjunto muniqués. Se quedó a medias el líder que rondó la primera derrota de la temporada por segunda semana seguida y que salvó con dificultad.
La salida a Stuttgart era una trampa para el Bayer Leverkusen. El equipo de Sebastian Hoeness es la otra revelación de la temporada en la Bundesliga. Después del Leverkusen, el papel del Stuttgart en lo que va de curso no es un asunto menor. Abocado a la parte baja en años atrás, ahora forma parte de la zona alta. Hoeness ha logrado hacer un bloque sólido que afrontó el envite con tres triunfos seguidos e instalado en el tercer lugar de la tabla. El empate le deja a un punto del Bayern Múnich y a 5 del Leverkusen.
Si el Bayer Leverkusen y el Stuttgart forman parte de lo mejor del curso de la Bundesliga también Florian Wirtz. El joven de 20 años es el nuevo niño prodigio del fútbol alemán. Uno de los consolidados de la competición germana, uno de los beneficiados del sistema y la confianza otorgada por Xabi Alonso.
Asomó en el momento que le necesitaba su equipo, al inicio de la segunda parte, con el marcador en contra. A bote pronto remató un centro del nigeriano Victor Boniface, que se deshizo estupendamente de su marcador tras recibir un pase de Granit Xhaka.
El encuentro adoptó una nueva dimensión en ese momento. Y renació el Leverkusen que en la primera parte salió peor parado del intercambio de golpes con el Stuttgart.
Cualquiera había podido marcar. Porque al disparo de Amine Adli a los nueve minutos que se estrelló en el palo y el posterior de Boniface, respondido por el portero local Alexander Nubel, contrarrestó el cuadro local con el de Serhou Guirassy, que deshizo el portero Lukas Hradecky.
La última amenaza fue visitante, en un córner botado por Alex Grimaldo que cabeceó Jonathan Tah y que salió ligeramente alto.
Después ya llegó el gol local, propiciado por el ida y vuelta sin cuartel. Josha Vagnoman se adelantó a su marcador y por la derecha recogió el balón, que envió al centro donde Chris Fuhrich esperaba. Marcó a puerta vacía. Puso por delante al Stuttgart.
La segunda mitad empezó de distinta manera. Se echó atrás el conjunto de Hoeness obligado por la presión del Leverkusen que equilibró pronto la situación con el tanto de Wirtz, el cuarto en lo que va de curso.
Insistió el equipo visitante que tenía al Stuttgart contra las cuerdas. Granit Xhaka, desde la frontal, disparó raso, al palo. El cuadro local se salvó. Y a dos del final, Tah, en otro córner, tiró fuera, por poco.
Se salvó el Stuttgart y no ganó el Leverkusen que rondó la derrota como hace una semana ante el Dortmund y que también empató. Fue un premio menor a lo esperado. Un punto que eleva a cuatro puntos la ventaja sobre el Bayern Múnich, aunque los bávaros con un partido menos.
