El español, Pep Guardiola, hizo una gran carrera como jugador, no obstante su fama creció al convertirse en técnico.
Actualmente está al mando del Manchester City, equipo que manda en Inglaterra y busca la gloria europea.
El diario británico, Dailymail, presentó un artículo en donde hace referencia a la trayectoria de Guardiola y su influencia en el fútbol mundial.
Aquí la nota
En caso de que el City gane la Champions ante el Inter, y son favoritos tan abrumadores que los corredores de apuestas ofrecen probabilidades de 2 a 9 en su victoria, se convertirán en el segundo equipo inglés en completar el legendario triplete, ganando la Premier League, la Copa FA y la Copa de Europa, en el misma temporada.
Para Guardiola, cuya reinvención de las bellas artes del fútbol ha sido comparada con la forma en que The Beatles cambiaron la música popular, sería la máxima confirmación de su genialidad.
Es la culminación de un viaje que comenzó en Santpedor, el bastión nacionalista catalán donde el umbral de piedra simbolizaba los humildes comienzos y los valores de sudor y esfuerzo de Guardiola.
Y uno que lo ha lanzado al mundo encantado en el que ahora habita su hija: un lugar donde lo llevan en un avión privado a las cumbres del desierto con los jeques de Abu Dabi, ricos en petróleo, que han transformado al Manchester City en uno de los clubes más ricos del mundo; donde es agasajado por estrellas de rock y actores de Hollywood; y admirado, por algunos, tanto por su afabilidad como por su destreza futbolística.
Según todos los informes, no es un papel que disfrute. El City, a pesar de toda su riqueza, siempre ha sido el club de cuello azul de Manchester, desdeñoso de sus vecinos del Fancy Dan, el United; convincentemente, el único otro club que ha logrado el triplete.
Fue esta imagen terrenal y la oportunidad de derribar al club de George Best y Bobby Charlton lo que ayudó a persuadir a Guardiola, un romántico cuyo libro favorito es Don Quijote, de mudarse con su familia a la ciudad de las terrazas de ladrillo rojo y la lluvia adoquines amarrados.
Uno podría imaginar que su supuesto salario de £ 19,7 millones también tuvo algún efecto en su decisión de unirse al City, después de períodos llenos de trofeos en Barcelona y Bayern Múnich.
No obstante, ahora se le puede ver paseando en bicicleta por Deansgate con una gorra plana y apareciendo en Sainsbury's para comprar un tubo de pasta de dientes, cada centímetro del mancuniano trabajador. Hágase amigo de Noel Gallagher, del que se dice que posee una pila de videos de Coronation Street, y complaciendo a los cazadores de selfies que se acercan a él mientras se sienta, como Sócrates, soñando con formaciones de fútbol bajo el sauce debajo de su apartamento en el centro de la ciudad de £ 2,7 millones, él dice que se siente 'amado' por la gente de su hogar adoptivo.
Pronto, se inaugurará un mural en el hastial de una casa frente al estadio Etihad del City, que capturará la pasión y la intensidad que lo encienden en la línea de banda.
María, la hija de Pep Guardiola
Si emulara a Alex Ferguson trayendo los tres trofeos principales para la gira obligatoria en autobús descapotable la próxima semana, será recordado eternamente, junto con LS Lowry, Alan Turing y los héroes de la Masacre de Peterloo.
José Mourinho podría pensar que es el Especial, pero Guardiola, que no solo gana más, sino que gana más estéticamente, es el verdadero negocio. Al observar a sus equipos, con sus tácticas en constante evolución, su supremacía es tal que a menudo parece que tienen un jugador extra en el campo. Fuera del campo de entrenamiento, sin embargo, no es menos fascinante.
Muy inteligente y culto, habla cinco idiomas, recita poesía catalana de memoria y buscó el consejo del gran maestro de ajedrez Garry Kasparov para mejorar su comprensión de cómo actuar bajo una presión intensa.
Sin embargo, Guardiola tiene sus defectos como la mayoría de los genios, uno de los cuales es su temperamento crítico y, como ha admitido, no es tan seguro de sí mismo como parece.
Entonces, ¿cómo se hizo este Einstein del fútbol?
Cuando los fanáticos del City planifiquen el Pep Pilgrimage Trail, seguramente comenzará en Santpedor, una ciudad de 7.500 personas cuyas afueras banales y modernas esconden la impresionante arquitectura medieval en su núcleo.
Encontrarán lemas pro-republicanos pintados por todas partes y la bandera catalana de rayas rojas y amarillas colgando de muchos balcones, ya que esta comunidad montañesa insular tiene una larga tradición de lucha por la independencia de España.
Cuando era niño, el padre de Guardiola, Valenti, se metió en problemas con el régimen represivo del dictador fascista, el general Franco, por cantar en su lengua materna en lugar del castellano.
Sin embargo, Valenti, un albañil, era ingenioso y ferozmente trabajador, rasgos que le pasó a su hijo, y después de casarse con la madre de Pep, Dolors, construyó una exitosa empresa de construcción.
Nacido en 1971, Pep, o Josep como lo bautizaron, fue el tercero de cuatro hijos. Cuatro años después, murió Franco y Pep se levantó en un momento de renovado optimismo para los nacionalistas catalanes, que esperaban un referéndum de independencia.
Cuando no se materializó, Pep tomó los garrotes republicanos, sin perder oportunidad de promover su causa. Lo ha puesto en conflicto con las autoridades.
Cuando dirigía Barcelona, su avión privado fue incautado y registrado por guardias civiles españoles, bajo sospecha de que estaba introduciendo de contrabando en el país al exiliado líder del parlamento catalán Carles Puigdemont. La FA lo multó con £ 20,000 por usar una cinta amarilla en apoyo de los separatistas encarcelados por 'traición' cuando el Manchester City jugó contra Wigan en la quinta ronda de la Copa FA en 2018.
Pero como me dijo esta semana el alcalde electo de Santpedor, Agusti Comas, amigo de la escuela y compañero de equipo junior de Guardiola, su renombre lo ha convertido en una 'voz poderosa' en el movimiento y podría tener un futuro en la política si así lo desea. deseos.
Cuando Guardiola era un niño pequeño, su padre esperaba que pudiera seguirlo en el comercio de la construcción.
Si bien la autoridad y la habilidad organizativa de su hijo brillaron en un campo de fútbol, Valenti dice: "Cuando se trataba de mi territorio, que es ser bueno con las manos, Pep es un absoluto desastre". Ni siquiera puede cambiar una bombilla.
'El día que lo llevé al trabajo conmigo, cuando aún era un niño, no volvió después del almuerzo'.
La ilustre carrera de Guardiola como jugador comenzó a los 13 años, cuando fue fichado por el Barcelona y superó la añoranza de su hogar para ingresar en su famosa academia juvenil, La Masia.
Su técnica era soberbia, obviamente, pero lo que se destacaba era su extraña habilidad para anticipar movimientos y pases y dirigir a otros mientras se ganaba su respeto: sellos distintivos de su gestión.
Como siempre hizo todo lo que le pedían los entrenadores, y más, lo apodaron Mr Perfect. Atrajo la atención del gran Johan Cruyff, entonces entrenador del Barcelona, quien se convirtió en su mentor.
Aunque estaba obsesionado con el fútbol y sus estrategias (un amigo también lo llama Mr 32 Minutos, el tiempo máximo que pueden hablar, antes de que su mente regrese al fútbol), el joven Guardiola accedió, un día, a modelar algunas prendas para Diseñador de moda español Antonio Miro.
El encargo lo llevó a Serra Claret, una de las boutiques propiedad de la familia de Cristina Serra, de 18 años, quien estaba siendo preparada para convertirse en compradora de la firma y luego se hizo cargo de ella junto con su hermana. Pronto comenzaron a salir y el elegante modisto comenzó a darle forma al desaliñado muchacho de Santpedor en el ícono del estilo de chaqueta de mohair que vemos hoy.
Cuando consiguió su primer trabajo directivo en Barcelona, a los 37 años, tenía mechones gruesos y rizados. Cuando se fue al Bayern de Múnich, cuatro años y 14 trofeos más tarde, estaba calvo como un loco, lo que llevó a Mourinho a comentar maliciosamente: "Cuando disfrutas de tu trabajo, no pierdes el pelo".
Ahora, con poco más de 50 años, Pep y Cristina llevan juntos casi 35 años, y además de su primogénita María, tienen a Marius, de 20 años, estudiante de deporte y ejercicio, y a Valentina, de 15.
Guardiola a menudo describe a su familia como su base, y dice que nunca haría un cambio de carrera en el extranjero a menos que Cristina aceptara unirse a él.
En su hora más oscura en 2001, se alega que usó nandrolona, una droga prohibida para mejorar el rendimiento, mientras jugaba para el club italiano Brescia y recibió una sentencia de prisión suspendida de siete meses. Fue su esposa quien lo sacó adelante. Pep tardó seis años en probar la falsedad de la acusación y anular la sentencia.
Curiosamente, sin embargo, la pareja esperó 27 años antes de casarse, en una ceremonia tranquila a la que asistieron algunos amigos y familiares, en 2014. Y a pesar de su evidente devoción, ya no están tan unidos como antes.
Hace cuatro años, se informó que Cristina viviría entre Manchester y Barcelona, para dedicar más tiempo a su negocio de moda, y esta semana una fuente bien ubicada me dijo que este arreglo continúa. En Barcelona, se queda en la enorme mansión de 10 millones de libras que compraron en el equivalente de la ciudad de Beverly Hills, donde los vecinos incluyen al cantante de ópera José Carreras.
La gravitación de Cristina de regreso a Cataluña llevó a especular que esta gloriosa temporada podría ser la última de su esposo en Manchester.
Sin embargo, ha firmado una extensión de contrato por dos años, su devoción por la ciudad y su gente reforzada por su estoica respuesta al ataque suicida con bomba en el Manchester Arena, que su esposa y sus dos hijas, que asistían al concierto de Ariana Grande esa noche. - escapó por poco.
Ahora es copropietario de un restaurante catalán en la moderna King Street, donde suele cenar, y dice: "Seré mancuniano el resto de mi vida".
Como se toma un tiempo para conversar con todos, desde el personal de la cantina hacia arriba en el campo de entrenamiento de City, el amor es recíproco.
Sin embargo, cuando llegó, en 2016, algunos no estaban contentos con su forma de controlar todo. No solo intimidó a sus jugadores para que mejoraran su estado físico, sino que se dice que insistió en que todos los empleados con sobrepeso también deberían ponerse a dieta, porque le molestaba mirarlos. También se negó a jugar contra el internacional inglés Kalvin Phillips, diciendo que pesaba demasiado cuando regresó de la Copa del Mundo.
Según el futbolista francés Samir Nasri, quien jugó brevemente con Guardiola, el entrenador, para quien ningún detalle es demasiado pequeño si puede obtener una ventaja sobre sus oponentes, incluso buscó regular la vida sexual de sus jugadores.
Para mejorar su fuerza muscular y sus patrones de sueño, afirma Nasri, le dijo al equipo del City que solo deberían hacer el amor con sus parejas antes de la medianoche. Guardiola supuestamente dijo que la superestrella Lionel Messi había mejorado su condición física siguiendo este consejo durante sus días en Barcelona.
Cuando se le preguntó sobre esto en una conferencia de prensa, Guardiola dio una respuesta típicamente exasperada y de izquierda. 'Es imposible jugar un buen fútbol si no tienes sexo con tu pareja. ¡No es posible!' el exclamó.
Fijando a su inquisidor con una mirada sardónica característica, agregó: 'Nunca hice una prohibición. Tienen que hacerlo. Cuanto más lo hacen, se vuelven mejores jugadores.'
Como suele ocurrir con Guardiola, que ha elevado la ironía a una forma de arte, nadie sabía si estaba bromeando o no.
Cuando se trata de los golpes maestros que ha planeado para esta noche, los italianos que se interponen en su camino hacia el histórico triplete seguirán adivinando de manera similar.
La imprevisibilidad es otro de sus puntos fuertes. En los últimos años, ha abolido las posiciones convencionales, como la de delantero centro y lateral, y ha convertido al robusto medio central inglés John Stones en un hábil creador de mediocampo.
La reverenciada madre de Guardiola murió, a los 82 años, de coronavirus en las primeras etapas de la pandemia. Enmarcada por las montañas que amaba, se muestra una fotografía de ella dentro de su tumba acristalada en Santpedor.
Su padre, que ahora tiene 92 años y vive en la impresionante villa de ladrillos naranjas que construyó, me dijo esta semana que el largo viaje a Estambul estaba más allá de sus posibilidades, aunque se las arregló para estar en Manchester para ver al City levantar el trofeo de la Premier League.
Así, verá el partido de esta noche por televisión con su hermana María Carma a su lado, tratando de mantener baja su presión arterial. "Se pone muy nervioso viendo los grandes partidos de Pep", dijo, dejando de fregar el umbral. Me preocupo por él. Le digo: '¡Basta, Valenti, o vas a tener un colapso!'
Moderadamente orgulloso de los logros de su hijo, el padre de Guardiola ha convertido una habitación del último piso de su villa en un minimuseo que muestra sus innumerables honores y preciados recuerdos.
Durante los próximos días, espera montar la exhibición más preciada de todas pero, como me dijo, a pesar de la aparente superioridad del City sobre el Milán, no da nada por sentado. "Hay tantos factores a considerar: el árbitro, las lesiones, un rebote afortunado de la pelota, así que solo digo, que gane el mejor", dijo con voz áspera, y agregó: "Cualquier cosa podría pasar". El fútbol no es como el ajedrez.
Quizás no, para simples mortales. Pero para el entrenador con las sinapsis más agudas que jamás haya visto el fútbol, es exactamente como el ajedrez. Esta noche, podemos esperar que el gran maestro de Manchester arrase con el tablero.
Y, como siempre ha invitado a su familia a la cancha para celebrar sus triunfos con él, deberíamos prepararnos para un nuevo lote de fotos de la cada vez más influyente hija de Pep, María.
Cuando salió al campo con el jubiloso equipo del City después de que ganaron la Premier League el mes pasado, un video de ella lamiéndose los labios, supuestamente con admiración, mientras el apuesto delantero centro argentino Julián Álvarez pasaba junto a ella, se volvió viral.
No importa que su gesto casi seguro fue mal interpretado, ni que Álvarez estuviera con su novia. En la tierra de fantasía de Internet que ella habita, las impresiones lo son todo.
Guardiola está orgulloso de María, quien obtuvo cuatro excelentes A-levels de una universidad privada en Manchester, como lo está de todos sus hijos.
Sin embargo, uno se pregunta qué debe hacer el hijo del humilde albañil de los bosques catalanes del mundo superficial en el que él y su familia han sido arrojados en virtud de su genio.
