El Liverpool no logró consumar la remontada ante el Arsenal por un gran Aaron Ramsdale que impidió la derrota de su equipo en Anfield. Los 'Reds' empataron 2-2 ante los gunners y nuevamente la Premier League se pone al rojo vivo.
No fue una jornada simple para Arsenal que empezó con todo, parecía que aplastaría a un durísimo rival, y terminó sufriendo más de la cuenta. Liverpool descontó justo antes del entretiempo y encaró la complementaria con otro ímpetu para hacer de la contienda una película de suspenso.
La visita abrió la cuenta a los 7 minutos cuando Bukayo Saka tocó con Martin Odegaard y el noruego quiso filtrar un pase que contó con ayuda. La pelota fue a los pies de Virgil van Dijk que, en el afán de despejar, se la regaló a Gabriel Martinelli que corrió mano a mano y no falló ante el achique de Alisson.
Era todo del Arsenal que merecía más. Oleksandr Zinchenko estuvo cerca del segundo con un zurdazo desde afuera que el arquero del Liverpool desvió con lo justo al córner. Apenas pasado el cuarto de hora, Saka mandó un gran centro desde la derecha y Gabriel Jesús, por detrás de todos, remató inexplicablemente desviado.
Los de Jürgen Klopp reaccionaron con una acción donde Andrew Robertson le ganó la espalda a Ben White aunque disparó desviado. Más allá de eso, eran los de Mikel Arteta quienes mejor parados estaban y así ampliaron la ventaja a los 27 minutos con un desborde de Gabriel Martinelli por izquierda y el posterior cabezazo de pique al suelo de Gabriel Jesús que dejó sin respuestas a Alisson.
Hubo un Arsenal que duró media hora, y otro que directamente desapareció en el resto de la contienda. Así, Liverpool descontó a cinco para el descanso en una buena jugada de Diogo Jota por el costado zurdo, el buscapié que enderezó Jordan Henderson, y la definición de Mohamed Salah por detrás de todos.
En la segunda parte, los de Arteta apostaron a la defensa para conservar la victoria en Anfield y lo pagaron carísimo. A los 6 minutos, Rob Holding embistió a Diogo Jota dentro del área, Paul Tierney sancionó el penal, y Salah le dio una vida extra a los Gunners rematando desviado desde los doce pasos.
Casi sin asustar nuevamente a Alisson, la visita recién llegó cuando iban 28 de la segunda mitad en una doble situación de riesgo. Robertson cortó justo lo que era una asistencia para Saka y, en la ocasión siguiente, el guardameta se quedó con un zapatazo de media distancia del noruego Odegaard.
Los Reds, aprovechando la actitud defensiva del conjunto de Londres, fueron a buscar la igualdad. Lo tuvo Darwin Núñez pero el uruguayo perdió en el mano a mano con Aaron Ramsdale. Sin embargo, bien cerca del epílogo, Trent Alexander-Arnold pinchó un centro por línea de fondo y Roberto Firmino de cabeza clavó el empate.
Liverpool le puso algo de pimienta a la recta final del campeonato con un 2-2 que fue un partidazo en Anfield. Arsenal tuvo todo para ganarlo, mezquinó y hasta pudo perderlo en el descuento para seguir liderando en la Premier League aunque, ahora, con una ventaja de cinco puntos y un partido más que Manchester City.
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