El futbolista argentino del FC Barcelona, Leo Messi, ha dejado a los niños con las ganas de verle en el entrenamiento de este lunes, que abría las puertas, como es tradición, para que los más pequeños disfruten de sus ídolos.
La sesión del Barcelona estaba prevista para las 11 de la mañana y las 14.000 localidades del Mini empezaban a llenarse. Entre cánticos y griterío, los aficionados han esperado la salida de los jugadores, que han saltado al terreno de juego un cuarto de hora después de lo previsto.
Y la decepción llegó al comprobar que Messi no estaba en el grupo. El club catalán explicó a través de un comunicado que tiene gastroenteritis. También decía que Rafinha se ausentaba por otitis y que la evolución marcará la disponibilidad para los próximos entrenamientos.
La baja de Messi llega justo después de la derrota del Barcelona en Anoeta, un traspié que le impidió beneficiarse de la victoria del Valencia sobre el Madrid. Messi, además, fue suplente, algo que se intuía ya que llegó de Argentina el día 2 con permiso del club. Su ausencia en el entrenamiento dará mucho que hablar.