Cuando en un campo de fútbol hay un choque de cabezas entre dos jugadores tras una falta, por lo general todo se termina de una manera; con una tarjeta roja.
Sin embargo, en la quinta división inglesa, el jugador del Bristol Rovers, Lee Mansell, logró evitar irse a las duchas temprano después de chocar con el jugador del Gateshead, JJ O'Donnell. Mansell fue directo a la cara de O'Donnell, pero en lugar de propinarle un cabezazo, se arrepintió y prefirió darle un beso en la boca para disimular la situación.
Y funcionó a las mil maravillas, pues su oponente no reaccionó de mala manera y más bien pareció haberle gustado...
El árbitro terminó dando Mansell una tarjeta amarilla, en lugar de una roja.
El centrocampista del Rovers dijo posteriormente que es una de las cosas tontas que ha hecho en un campo de fútbol.
"Lo hice para calmar la situación. Es la primera vez que he sido amonestado por besar a alguien... Me metí en el carro para ir a casa y vi que Twitter estaba candente. Además mi señora me escribió y el mensaje decía -¿Qué demonios estabas pensando-", declaró el jugador.
"Es otra cosa que añadir a la lista de las cosas tontas que he hecho en un campo de fútbol", agregó.
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