Romelu Lukaku no la pasa bien por el confinamiento que decretó el gobierno de Italia ante la pandemia de coronavirus que ha dejado 3 mil 405 muertes en el aquel país.
El delantero del Inter de Milán no ha podido ver a su familia, a su madre y a su hijo, que dejó Lombardía para volver a Bélgica, según apunta HLN y habló con Ian Wright, exjugador del Arsenal, sobre cómo la ha pasado en nueve días encerrado.
“Casi me volví loco ayer. No puedo salir, no puedo entrenar. Me siento encerrado y ya llevo nueve días. Echo de menos la vida normal. Estar con mi madre y con mi hijo. Con mi hermano. Pienso en todos y es triste. No puedes tener contacto con las personas que amas”, dijo.
Lukaku explicó que no puede acercarse a su madre por ser diabética, que la pone entre la parte de la población vulnerable al COVID-19.
“Tengo que tener cuidado. Mi madre tiene diabetes así que no puedo ir y abrazarla. Ella ya no sale. Mi hermano y yo se lo dijimos de inmediato. Ni pensarlo. Sale al jardín y por la noche, después de anochecer, toma un poco el aire pero nada más”, añadió.
Además mencionó que en el Inter le regalaron equipo para poder mantenerse en forma, ya que hay varios jugadores que viven en departamentos y no tienen espacio para ejercitarse adecuadamente. De igual forma, el club les envía comida para que mantengan la dieta.
“Me dieron una bicicleta estática porque los jugadores vivimos en apartamentos en el centro. Yo no tengo espacio para entrenar y preguntaron por el grupo quien necesitaba una bicicleta o una cinta para correr en casa. Mi fisio me trae comida todos los días y sigo mi dieta estricta. A las doce de la mañana desde el club nos envían a alguien con la comida y podemos mantener nuestra dieta”, mencionó.