El traspaso de Philippe Coutinho al Barcelona fue un negocio redondo para el Liverpool. No sólo por los 145 millones de euros que ingresó el conjunto inglés –el traspaso más caro de la historia sólo superado por los 222 millones de Neymar–, sino porque su marcha despejó el camino para que Jürgen Klopp afianzara el 4-3-3 con Mané, Salah y Firmino en el tridente atacante.
Peter Moore, director deportivo de los reds, aprovechó un acto en Ciudad del Cabo (Sudáfrica) para hablar abiertamente del acierto que supuso la venta del brasileño en enero del 2018 en todos los sentidos. Originó un cambio en el equipo, tanto en la estructura como en la manera de jugar.
“Si recuerdas, cuando se fue hace dos años, hubo un cambio completo en el estilo de juego y apenas perdimos un partido más en el resto de la temporada”, señaló Moore, si bien los números no son precisos. Perdieron tres encuentros de Premier League, en la FA Cup y la final de la Champions contra el Real Madrid.
En la temporada siguiente, el Liverpool de Klopp dio un paso adelante al levantar la Champions y en la actual es líder destacado de la Premier, con 22 puntos de ventaja. Hace 30 años que en Anfield no se celebra el título liguero. “No quiero faltar al respeto a Coutinho, pero él tenía una forma diferente de entender el fútbol. El dinero que nos dio sirvió para traer a Alisson Becker”, agregó Moore.
Según informó ‘El club de la mitjanit’ de Catalunya Ràdio, el centrocampista cedido al Bayern hasta junio a cambio de 8,5 millones ha comunicado al Barça, cuyo vínculo expira en el 2023, su intención de continuar en el club bávaro la próxima temporada. El Bayern tiene una opción de compra fijada en 120 millones y de momento, según las mismas fuentes, no tiene decidido si la ejercitará. El Barça podría rebajar su pretensiones con tal de ingresar dinero por Coutinho el próximo verano.
Pese al interés del jugador de seguir en Alemania, se antoja complicado que el Bayern se lance a por él por una millonada. Ha marcado 7 goles y repartido 8 asistencias en 27 partidos sin ser titular indiscutible con Hans-Dieter Flick. En su día sucedió algo parecido con James Rodríguez, cedido dos años en Munich y devuelto esta temporada al Real Madrid.