El equipo de Andorra, del cual es dueño, Gerard Piqué estuvo en varias ocasiones a muy pocos centímetros de clasificarse para las segunda ronda de la Copa del Rey de España.
Ninguna fue tan clara como la que dispuso en la tanda de penaltis. El conjunto del Principado solo necesitaba un tanto más desde los once metros.
El encargado de lanzarlo era Sidibé. En lugar de hacerlo fácil, optó por lo bonito. Pero no le salió bien. Su disparo 'a lo Panenka' se fue al cielo de Andorra y al final fue el Leganés el que pasó de ronda.