Aunque debería hablarse más de que el Freiburgo se encuentra ahora mismo en puesto de Liga de Campeones, el triunfo sobre el Eintracht creó una nube de polémica cuando se cumplía el último de añadido.
Sucedía que los visitantes perdían. Abraham, que fue rápido a la banda para poner en juego el balón, le pidió el esférico al banquillo corriendo hacia él. Cuando se acercaba, el entrenador local, Christian Streich, que había esquivado la bola, le dijo algo.
Entonces, el futbolista del Eintracht le hizo una brusca carga con el hombro derecho que, literalmente, le hizo volar el aire hasta caer tieso al terreno de juego.
Inmediatamente, muchos de los integrantes del banquillo local salieron a afear a Abraham su actitud, quien incluso tuvo que esquivar algún puñetazo. Hubo una súbita melé de jugadores empujándose, aunque por suerte la acción no dejó más agresiones y el entrenador local se levantó rápidamente del suelo.
Anders Frisk, tras visionar la polémica por completo en el monitor del VAR, resolvió la acción expulsando al visitante (previamente había mostrado la roja a Fernandes por doble amarilla) y mostrando amarilla a un integrante del banquillo del Freiburgo.
Fuente: es.besoccer
