Dario Benedetto, aún desconocido goleador de Boca Juniors antes del verano, ya se ha convertido en "Dariogol" en boca de periodistas y simpatizantes del Marsella.
Con sus cuatro goles marcados en seis días, el argentino, delantero y picante, está a punto de tomar la capa del famoso gran delantero Didier Drogba, que estuvo en 2004.
"Su precisión e inteligencia en los últimos metros son formidables", dice el ex futbolista francés Basile Boli. Tiene el fervor en las piernas que agrada a los marselleses. "Eso es lo opuesto al patético Kostas Mitroglou y al holgazán Mario Balotelli, que finalmente desesperó al Velódromo. Benedetto tiene todo para encajar en el linaje de los grandes anotadores del club", asegura Mario Albano, autor del libro Grandes anotadores de Marsella, sin compararlo con las leyendas del pasado, Gunnar Andersson, Josip Skoblar y Jean-Pierre Papin.
Si "Dariogol" reproduce las estadísticas de Sonny Anderson, Mamadou Niang y André-Pierre Gignac, obtendrá un lugar cálido en el paisaje de Marsella. Como dijo Didier Drogba, héroe eterno después de una sola temporada en Marsella, "de sus goleadores, Marsella es un héroe". Ciertamente porque, durante cincuenta años, cada vez que el club ganó el Campeonato, un jugador del Marsella terminó como el máximo goleador de la competencia. Un caso único en Francia.
