La carrera futbolística de David James fue de alto perfil.
Jugó para equipos como Watford , Liverpool , Aston Villa, West Ham y Manchester City .
En el apogeo de su éxito, estaba ganando 65,000 euros a la semana mientras jugaba para Portsmouth.
Pero antes de renunciar a su carrera a los 26 años como portero en 2014, lo perdió todo.
James fue declarado en quiebra y se vio obligado a subastar una serie de pertenencias personales.
Estos incluyeron una amplia gama de recuerdos de fútbol, incluidas 150 camisetas que usó.
También se subastaron equipos de DJ, incluidos alrededor de 1.800 discos, una furgoneta y una motosierra de gasolina.
No está claro cómo James cayó en bancarrota, pero se cree ampliamente que se debe a las deudas acumuladas después de su divorcio de su esposa Tanya en 2005.
James, quien se estima que ganó unos 22 millones de euros en toda su carrera como jugador, quizás no fue el más inteligente con su dinero.
En una autobiografía de 2004, su ex compañero de equipo de Liverpool, Stan Collymore, describió cómo era vivir con James mientras se alojaban juntos en 1995.
"Si tuviera un auto nuevo y se lo tragara, simplemente iría a comprar uno nuevo, por lo que había cinco autos estacionados en el camino", explicó Collymore.
“Si compró un par de zapatos nuevos y los raspó, no los limpiaría. Simplemente los arrojaría y compraría un par nuevo.
Demasiado ingreso disponible, supongo. Demasiado fácil solo para botar cosas. Demasiado fácil gastar dinero como si ganaras ese tipo de dinero por el resto de tu vida ".
A pesar de esto, el Independent informó en 2014 que James se declaró en bancarrota con el mismo enfoque "filosófico" que adoptó durante toda su carrera futbolística.
Era, y sigue siendo, un espíritu libre y un individuo generoso.
Antes de su bancarrota, estableció su propia fundación para patrocinar proyectos en Malawi y se informa que puso gran parte de su propia riqueza en la organización benéfica.
Su columna de periódico con The Observer, que funcionó durante muchos años, se realizó a cambio de donaciones a la fundación.
También se afirma que cuando Portsmouth, el club donde probablemente ganó el salario más alto de su carrera, entró en la administración, James donó el acuerdo de sus acreedores a los miembros del personal del club que no estaban remunerados y corrían el riesgo de perder sus trabajos.
Collymore, en la misma autobiografía, quizás resumió a James de la manera más perfecta.
Él dijo: "Puede parecer el tipo más grueso y tonto del planeta, pero solo necesitas escucharlo hablar en momentos más racionales para darte cuenta de que es un tipo muy brillante".
