El regreso de Wayne Rooney al Reino Unido "ha sido impulsado por su deseo de salvar su matrimonio", según los informes.
Al parecer, el ex capitán de Inglaterra de 33 años "perderá millones" al regresar para convertirse en el entrenador de jugadores del condado de Derby.
Wayne decidió frenar su aventura estadounidense, donde fue capitán del DC United en Washington, y se dice que la decisión dejó a su esposa Coleen "extasiada".
Coleen ya regresó al Reino Unido con sus hijos Kai, Klay, Kit, de nueve, seis, y quince años, y comenzarán la escuela en septiembre.
Se espera que los Rooneys se muden a su casa de $25 millones en Cheshire, tan pronto como se haya terminado.
Fuentes cercanas a la familia han indicado que Coleen esperaba regresar al Reino Unido, a pesar de que significaba una gran caída en los ingresos.
La fuente le dijo a The Sun que Coleen insistió en que Wayne "la puso a ella y a los niños primero".
Por su parte, Wayne cree que el recorte salarial "vale la pena para hacerla feliz".
Según los informes, Coleen "está estableciendo a los niños en el Reino Unido de forma permanente y ha comenzado el proceso de trasladar sus pertenencias".
Wayne no regresará al Reino Unido de manera permanente hasta enero, ya que terminará la temporada de la MLS con DC United.