Neymar observó el partido desde la gradería
La Supercopa de Francia se jugó este sáabado en China y esta vez fue el PSG quién se impuso ante el Rennes. Los goles de la victoria fueron de Mbappé y Di María.
El Rennes siempre incomoda al PSG y de nuevo lo volvió a demostrar a los 12 minutos.
Hunou le ganó la espalda a Kehrer y anotó el primero del partido para un Rennes que empezó fuerte el partido. Ese gol encendió a un PSG que por medio de Sarabia y sobre todo de Mbappé, buscaba dar la vuelta a la final. No tuvieron premio en la primera parte y en la segunda fue prácticamente un monólogo de los de Tuchel.
Mbappé se echó el equipo a la espalda y al borde de la hora de partido encontró premio. Un pase filtrado de Marquinhos lo aprovechó Sarabia para asistir a Kylian y empatar el partido. El ‘7’ arengaba a un público chino que vibraba con la estrella del PSG (mientras Neymar estaba en la grada).
Desde ahí vio cómo a los 72 minutos llegaba la obra de arte del partido en forma de falta directa. Di María acertó a conectar un tiro libre perfecto escorado a la escuadra que hizo al portero una estatua. Remontaba el PSG y el Rennes trató en los últimos minutos de igualar el partido, pero sin éxito.
El PSG se proclamó campeón de la Supercopa por séptima vez, no sin tener que sufrir ante un rival que parece tenerle tomada la medida. Mbappé fue el líder, Neymar en la grada y ahora lo que resta es que empiece la Ligue 1.
A pesar de no haber jugado el partido, Neymar bajó al campo de juego a recibir su medalla de campeón
