El árbitro asistente Diego Silva pidió disculpas por validar un gol inexistente a favor de San Lorenzo y que significó el empate 1-1 contra Cerro Porteño por el torneo de primera división de Paraguay.
El partido se jugó el pasado miércoles y Cerro necesitaba ganar para acercarse en la tabla de posiciones al líder Olimpia, que igualó 2-2 con Capiatá.
La polémica se produjo a los 77 minutos, con Cerro Porteño al frente 1-0 en el marcador. Un remate del uruguayo Sebastián Fernández desde fuera del área pegó en el travesaño y luego picó en el área chica. Sin embargo, el árbitro principal Cristian Aquino señaló el gol a instancias de Silva.
"Pido disculpas al público de Cerro Porteño porque me equivoqué muy grande y feo", expresó Silva en una rueda de prensa.
Según el delantero cerrista Nelson Haedo Valdez, Silva les provocó durante el partido. “Instigó a la violencia cuando, ante mi reclamo del porqué validó el gol, me respondió: ‘hace 22 jornadas que están atrás en la tabla y me venís a reclamar una jugada’”.
El argentino Horacio Elizondo, instructor de los árbitros del fútbol paraguayo, comentó que "no hubo intencionalidad arbitral en los errores" pero anunció que tanto Silva como el juez principal Cristian Aquino no serán designados, temporalmente, para dirigir partidos de cualquier categoría.
Olimpia lidera el campeonato con 44 puntos y Cerro le escolta con 37.
Piden disculpas públicas
Cristian Aquino y el asistente Diego Silva, colegiados del encuentro, presentaron disculpas este jueves a la afición paraguaya por validar el gol.
En una conferencia de prensa en la sede de la APF, Aquino asumió "plenamente" su error, pero dijo que fue "involuntario".
Tras declararse "apenado" y "avergonzado" Silva se disculpó, especialmente ante la afición del Ciclón, segundo de la clasificación de la Liga.
El resultado, a falta de tres jornadas para el fin del torneo, impidió al Cerro recortar algo de los siete puntos de diferencia que le separa del líder Olimpia, que también igualó en la decimonovena fecha del Apertura.
La decisión arbitral dejó con "la boca abierta" al director de Árbitros de la APF, Horacio Elizondo, según reconoció en esa rueda de prensa, quien informó además que decidió "desprogramar" al árbitro y al asistente de todos los partidos hasta que se resuelva su caso, que podría acabar en el Tribunal de Disciplina del organismo, según indicó.
Elizondo descartó "la intencionalidad del hecho" que calificó de error humano y fortuito.
Sin embargo reiteró que Aquino y Silva deberán "asumir la responsabilidad", por lo que una comisión arbitral en la que él participa decidirá "en las próximas horas" si eleva el caso al Tribunal disciplinario.
En ese caso, si la sentencia entiende que hubo intencionalidad, "la pena va a ser grave" y si fue involuntario "será menor", explicó.
Elizondo descartó su renuncia inmediata, como horas antes le pidió el presidente de Cerro Porteño, Raúl Zapag, aunque indicó que cuando finalice el torneo y se resuelva el caso de los errores arbitrales "veré qué hago".
Zapag no solo pidió la renuncia de Elizondo por el error arbitral, sino que extendió esa petición a toda la directiva de la APF y en concreto a su presidente, Robert Harrison, al que consideró "responsable" del "bochorno internacional que estamos viviendo en el fútbol paraguayo" y de la "pésima administración" de la APF.
Zapag advirtió que la administración de Harrison hace que la APF actualmente "no representa" al club Cerro Porteño.
El 8 de marzo Zapag ya envió una queja formal a la APF para exigir una investigación a los árbitros paraguayos y para reclamar una mayor transparencia sobre los salarios que perciben.
Dos días después, la institución contestó a través de un comunicado en el que condenó sus "insinuaciones tendenciosas", aunque publicó las cantidades que perciben los árbitros por dirigir los partidos de la primera división paraguaya.