El equipo Liverpool sufrió demás, pero al final logró vencer al Southampton por marcador de 1-3 en calidad de visitante gracias a una reacción que fue orquestada por el egipcio Mohamed Salah.
El conjunto local salió con hambre y se fue rápidamente el frente, haciendo gol a los 9’ minutos por conducto de Shane Long. Los de Klopp se vieron sorprendidos en los primeros minutos, pero poco a poco comenzaron a nivelar las acciones de juego.
Sadio Mané fue el primero en orquestar la reacción con un cabezazo que fue bien solucionado por parte de Angus Gunn. Pero las acciones de gol continuaban una tras otra, hasta que a los 36 minutos llegó la igualdad por medio de Naby Keita.
Tras el empate, Liverpool se convirtió en el mandón, disparos de media distancia y oportunidades fallidas eran una constante en el encuentro. En el ataque había muchas fallas desde las bandas.
Fue hasta a diez minutos de que terminara el partido cuando apareció nuevamente la figura del egipcio Mohamed Salah para que arreglara un partido que parecía terminaría en empate, uno de sus disparos en un contragolpe se clavó en la esquina inferior izquierda y borró las sonrisas de los de casa.
Jordan Henderson completaría un partido que ya se había decantado hacia un solo lado y marcó a los 86 minutos decretando el 3-1 definitivo.
El resultado deja el Liverpool como líder de la Premier League con 82 unidades y marca una ligera distancia del Manchester City de 2 puntos, aunque los Citizens aún deberán jugar ante el Brighton y el Hove Albion.