El Nantes, en el primer juego tras la confirmación del trágico fallecimiento de su ídolo Emiliano, esperó el partido ante Nimes con un estadio pensado 100% para homenajear al delantero santafesino.
Primero le dolió, cuando cuestiones del fútbol y del mercado, lo trasladaron al Cardiff galés de la Premier League. Después lo lloró, cuando la confirmación oficial dejó atrás a los primeros rumores y a las últimas esperanzas...
El santafesino Emiliano Sala, el ídolo de Nantes que dejaba el fútbol francés para irse a Inglaterra, ya no estaba ni en un lado ni en el otro. Las cosas de la vida lo encontraron dentro de un avión en el pleno Canal de la Mancha. Sin embargo, a pesar de su ausencia física, los hinchas del elenco galo no dejan de recordarlo. Ni cuando las expectativas todavía existían. Ni ahora.
Este domingo, en ocasión de enfrentar al Nimes, acabaron por demostrarle al mundo qué significaba Sala para ellos. Todas las entradas, plateas y populares, costaron 9 euros, un precio económico para que el Stade de la Beaujoire-Louis Fonteneau se llene y con un número relacionado al dorsal que vestía Emiliano.
Además, el equipo cambió el amarillo tradicional por una camiseta negra, de luto, con el apellido Sala por encima de la numeración. En el círculo central, antes del partido y en el entretiempo, se colocó una lona con su rostro, y no se musicalizó durante el espectáculo para que sólo se canten a capella las canciones que lo tenían al argentino como protagonista. Además, se hizo un minuto de aplausos antes del pitazo inicial. Allí todos se unieron por ídolo. Y todos iguales, todos fueron Sala.