El Real Madrid lleva desde septiembre buscando a un nuevo ídolo que sustituya a Cristiano Ronaldo tras su marcha a la Juventus. Bale, Benzema e Isco han sido candidatos a convertirse en el nuevo favorito en el corazón de los seguidores merengues, pero tras diez partidos seguidos como titular Vinícius Junior ha ido ganando puntos importantes.
Medios y afición coinciden en que, con sólo 18 años de edad, al brasileño todavía le falta mucha evolución para alcanzar el nivel de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, el buen rendimiento en sus últimas actuaciones, sumado a las ansias generales de encontrar un nuevo ídolo, lo convierten en la gran esperanza del club blanco.
Con 4 goles y 9 asistencias en 21 partidos disputados, Vinícius Junior empieza a apuntar maneras y a acaparar los focos cuando salta al terreno de juego.
El diario El Confidencial de España le dedicó esta nota a Vinicius:
La conclusión en el Real Madrid con Vinicius es que tienen un futbolista que ha sido capaz de demostrar en su primer Clásico que puede liderar un equipo en un futuro no muy lejano. Tiene personalidad y atrevimiento aunque le falten puntos que irá aprendiendo y perfeccionando con el paso de los meses y competiciones.
Gusta que Vinicius prefiera equivocarse a esconderse, ser protagonista a estar en un segundo plano. Tiene el hambre que exige Florentino Pérez y la frescura que busca Solari. Muchas virtudes en lo físico y técnico y algunos defectos que corregir, como el exceso de velocidad cuando cae en la precipitación y el ansia por ese fútbol subido en revoluciones. La puntería se entrena y el gol le dará el salto a la categoría de estrella. En líneas generales sobresalió y sigue creciendo. Jugó como si estuviera en su barrio y no se le cayó encima el Camp Nou en el 1-1 de Copa del Rey.
Es pronto, demasiado, para darle la responsabilidad de coger las riendas del Madrid, pero sorprende en el club que el joven tenga un grado de compromiso y perfil tan alto. Hay madera de buen futbolista y los siguientes partidos seguirán confirmando si rompe para crack. Lo que no se le puede poner es freno a un 'niño' de 18 años que ha sido capaz de entrar en el primer equipo en una coyuntura de crisis y convertirse en un referente en el ataque. Sin experiencia, con poca adaptación y mucha competencia, lo que se destaca de Vinicius es la influencia que tiene sobre sus compañeros y la capacidad de intimidación en los rivales.
Al brasileño le faltó el gol en el Camp Nou para redondear su debut en el Clásico. Tuvo su ocasión en un mano a mano con Ter Stegen y decidió jugársela. Detalle que se destaca como positivo en un joven futbolista que siente seguridad en todo lo que hace. Sea regatear o finalizar. Kroos, desmarcado, le reprochó su egoísmo. Mientras estuvo en el césped y, sobre todo en la primera parte, todo el peligro del Real Madrid en ataque llegó por su banda. Vinicius dio profundidad por la izquierda, encaró a Semedo, se atrevió contra un excelente Piqué, subió el ritmo de los ataques y los contraataques, replegó en defensa para recuperar balones y ‘mordió’. Fue la mayor amenaza para el Barcelona mientras estuvo en el césped. Cuando Solari lo quitó, el equipo perdió vértigo, chispa y valentía.
Bale, en evidencia
Las sensaciones con Vinicius son excelentes. Es atrevido, pero le falta el gol y al Madrid le cuesta mucho concretar las ocasiones. Acaba de estrenar mayoría de edad y el margen de progresión es enorme. Su problema es la pausa. Es potente, tiene un excelente uno contra uno y le falta elegir bien. Es un chico exuberante en lo físico, generoso en el esfuerzo y valiente. Así lo confirma Solari. Si mañana se jugara una final, por cualquier título, Vinicius sería titular porque es un peleón. Un incordio que aprieta en ataque y en defensa. Se sacrifica. Es un descubrimiento y un soplo de aire fresco en una plantilla en la que están cuestionados varios jugadores de peso. Lo de Vinicius tiene un enorme mérito por su actitud –intensidad y compromiso– y mentalidad –voracidad–.
Cuando uno da todo lo que tiene no está obligado a más y Vinicius se vació en el Camp Nou mientras otros compañeros quedaron señalados por sufrir despistes y pasar desapercibidos. Marcelo y Bale son los dos ejemplos. Vinicius es un juvenil, pero tiene el espíritu que necesita el Real Madrid y el que demanda Florentino y Solari. Podrá estar más o menos acertado y seguro que le queda mucho por mejorar. Sacó una buena nota y los colores al que entró por él: Bale. La inactividad es un problema en el galés y le falta frescura y agilidad. Tuvo una clara ocasión de gol y estuvo lento en la definición. Del Camp Nou sale reforzado Vinicius y señalado Bale. El brasileño ha hecho méritos para volver a ser titular en el derbi del sábado contra el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano.
Fuente: Diario El Confidencial