En cerca de 6 años dirigente chapín recibió más de $4 millones en viáticos y sueldo de FIFA
El ex jefe del fútbol de Guatemala y ex integrante de los comités ejecutivos de FIFA y Concacaf, Rafael Salguero, se libro de la cárcel luego de acceder a ayudar a la justicia de Estados Unidos sobre el gigantesco escándalo de corrupción denominado FIFAGate.
Salguero, de 73 años, se encontraba desaparecido, cumpliendo un arresto domiciliario en un lugar secreto desde diciembre de 2015 como medida para salvaguardar su vida. Desde su arresto secreto, el ex funcionario de la FIFA estuvo revelando crímenes propios y ajenos al gobierno de Estados Unidos.
Gracias a su colaboración con la justicia, que incluyó documentos judiciales, en parte tachados para impedir la lectura de ciertos nombres o países, Salguero logró este jueves librarse de una pena máxima de 20 años de cárcel por cada uno de los delitos por los que era acusado: asociación criminal para delinquir, dos cargos de conspiración para cometer fraude bancario y uno de conspiración para lavar dinero.
Según una información presentada por el periodista Ken Bensinger, para asistir al Mundial 2010, FIFA le pagó a Rafael Salguero US $96.361. A través de un poco más de 6 años, Salguero recibió más de $4 millones en viáticos y sueldo de FIFA.
Comenzó a colaborar con el gobierno desde el primer día, incluso antes de llamar a su abogado, según explicó este jueves a la jueza Pamela Chen su defensor, Louis Freeman.
Debido a su cooperación, la jueza aceptó la sentencia sugerida por el fiscal Sam Nitze: nada de cárcel, y dos años de libertad condicional. Ahora, Salguero deberá restituir hasta US$ 288 mil dólares, en parte por los sobornos recibidos a cambio de la concesión de derechos de televisación de torneos de fútbol, tráfico de influencias y reventa ilegal de entradas para diferentes Mundiales, de los cuales ya pagó US$ 168 mil.
Durante la sentencia, había indicado a la jueza Chen que estaba "profundamente arrepentido de algunos errores cometidos". Pero atribuyó sus fallas a "un tsunami que abarcó al fútbol mundial y que venía de muchos años atrás, de finales de los '80".
Tras el fallo, Salguero abrazó a uno de los fiscales del FIFAGate y se declaró aliviado por este "final feliz".
"Estoy tranquilo y feliz", dijo Salguero antes de dejar la corte. "Regresaré a Guatemala en el momento que pueda. Quiero estar con mi familia y dedicarme a ellos", añadió.
MEGA CASO DE CORRUPCIÓN EN LA FIFA
Salguero es uno de los acusados del FIFAGate, el escándalo develado por el gobierno estadounidense que acusó a 42 personas y a empresas deportivas de 92 delitos y de aceptar más de 200 millones de dólares en sobornos.
En su declaración de culpabilidad, conocida el martes, dijo que como expresidente de la Fedefut intercedió en 2009 y 2010 ante el entonces presidente, Brayan Jiménez, para que aceptara sobornos de la empresa deportiva Media World a cambio de los derechos de televisación y marketing de partidos de la selección guatemalteca clasificatorios de la Copa del Mundo. Por esto cobró 20.000 dólares.
También contó que aceptó 100.000 dólares en sobornos para otorgar derechos para varios torneos de fútbol a Full Play, la empresa de los argentinos Mariano y Hugo Jinkis, un plan que integraron también Alfredo Hawit, presidente de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), y Ariel Alvarado, jerarca de la misma confederación.
Y relató que en 2010, durante un vuelo en avión de México a Guatemala, intentaron sobornarlo ofreciéndole cientos de miles de dólares de "un italiano muy rico" para que como miembro ejecutivo de la FIFA votase a favor de un país (tachado en la transcripción judicial) para la Copa del Mundo de 2018.
Finalmente Salguero votó por ese país, e intentó recibir el dinero, pero nunca lo consiguió.
Reveló asimismo que revendió entradas que compró como jerarca para las Copas del Mundo de 2006, 2010 y 2014, embolsándose ilegalmente 40.000 dólares.