El nuevo entrenador de Mónaco, el francés Thierry Henry, mantiene una relación complicada con la prensa de su país y un sector del público. Este sábado debutó al mando de su nuevo equipo y perdió.
Amor y odios
Desde el principio, el exdelantero quiso dejar las cosas claras. Sabía, después de todo, que necesariamente sería interrogado sobre sus delicadas relaciones con su país natal.
¿Dudó volver por eso? "Lloré durante mi carrera como jugador, dejé todo eso atrás ", dijo durante su presentación esta semana.
"Todos saben el apego que tengo para un club en Londres. Pero es aquí donde comenzó todo, es un club que tiene un lugar especial en mi corazón", agregó.
Así que aquí está de vuelta en Mónaco, club de su debut profesional, en el Campeonato de Francia, por su primera experiencia como entrenador en jefe. En un país que, cuando era jugador, lo amaba y lo culpaba al mismo tiempo.
"Él eligió protegerse"
El choque entre Bélgica y Francia en las semifinales de la Copa Mundial fue un buen recordatorio. Si recordamos especialmente esta mano contra Irlanda (y el hecho de que, según algunos, pudo haber prevenido a Knysna), que clasificó a los Blues en la Copa del Mundo de 2010, el jugador ha compartido mucho antes de eso.
"Existe la sensación de que nos gusta o que no lo apreciamos, pero que no deja indiferente a nadie. Es cierto", dice Sébastien Bellencontre, especialista en gestión de imágenes deportivas.
Pero lo que es paradójico es que no tiene el comportamiento no deportivo de un jugador que no deja a nadie indiferente precisamente. Es alguien que es apreciado por su historia y su talento. Y al mismo tiempo, nos hubiera gustado que diera más. Él eligió protegerse y mantener algo de privacidad. Su comportamiento es percibido por algunos como falta de empatía, por otros como modestia.
Hay que admitir que los medios de comunicación también tienen un papel que desempeñar en este delicado acercamiento.
"Su imagen también fue complicada debido a su relación con la prensa, porque no le dio suficiente ", dice el especialista.
Influyó su imagen con el público. "Discreto en la prensa, Henry prefiere las entrevistas largas que hablan de preguntas rápidas después de los partidos.
Un ejemplo de eso se presento con un periodista de 10 Sport , transmitido por los propios medios de comunicación, después de una reunión de los Red Bulls de Nueva York. A la pregunta "Nuevo clic, nueva temporada y nuevo look: ¿qué es esta barba? Los antiguos artilleros están asombrados".
"Estas son las preguntas que me hacés, ¿en serio? La temporada será larga".
Después de la tormenta que siguió a su acción contra Irlanda en 2009, también culpa a los medios franceses por no haber apoyado lo suficiente. William Gallas, el goleador del partido, habló hace unos meses sobre SFR Sport: "Lo que más me molestó es que los medios franceses nos han torpedeado. Y debido a los medios de comunicación franceses, ha estado en todo el mundo. "
"Se alimenta de presión"
Quizás, finalmente, Henry ya estaba adelantado a su tiempo. Al menos, eso es lo que piensa Sébastien Bellencontre: "Fue comercializado muy rápidamente por las marcas. Desde la generación 98, fue uno de los jóvenes que tuvo un éxito increíble. Estaba muy ocupado, y optó por explotar su imagen al máximo porque le interesaba. Hoy no se veía bien, y en ese momento era aún menos porque el mercado no estaba maduro. Fue mal interpretado. Otro cambio importante de la época, con la decisión de Bosman unos años antes (1995), los jóvenes se exportan a sí mismos. Cuando Henry dejó Francia en 1999, su elección no fue entendida por todos. Lo que hoy parece más natural para una persona joven no lo hace".
"Puede darse menos tiempo que un Deschamps o un Zidane. Pero si tuviera que tomar todas sus decisiones basándose en la presión, no habría alcanzado ese nivel. Se alimenta de la presión", continúa Bellencontre.
Antes de agregar que "aceptó la idea de que nunca será unánime en Francia", incluso si "Mónaco todavía puede permitirle tener un nuevo estatus aquí".
Thierry Henry, probablemente preferirá adquirir este estado en su banco en lugar de justificarse detrás de un micrófono.
Fuente: .francefootball.fr
