El entrenador del Arsenal, Arsène Wenger, pidió finalmente disculpas por el enfrentamiento que tuvo la semana pasada con el portugués José Mourinho, en el derbi londinense ante el Chelsea.
"Siempre he rechazado cualquier signo de violencia en el fútbol y por ello me disculpo. No debería haber reaccionado así, pero en ningún momento estuve en su área técnica", soltó el timonel del Arsenal.
Lo que sí está claro para Wenger es que Mourinho lo provocó y por eso su reacción.
"¿Si me provocó? Eso es lo que yo sentí en aquel momento", afirmó el técnico francés al medio de su país, Téléfoot de TF1, después de que al día siguiente no reculara por el bochornoso acto.
¿Hará lo mismo Mourinho?