Hace unos días, medio centenar de ultras del Sporting de Portugal se coló en las instalaciones deportivas del equipo para amenazar a la plantilla y al cuerpo técnico, llegando a agredir a varios jugadores como por ejemplo al delantero Bast Dost, que publicó fotos de las heridas que tenía en la cabeza. Msis y Battaglia también fueron agredidos.
Ahora, el diario Público de Portugal ha sacado a la luz que el entrenador, Jorge Jesús, tiene pruebas de que el ataque fue orquestado por el propio presidente, Bruno de Carvalho, lo cual le permitiría desvincularse del equipo.
Al parecer, Carvalho se reunió con los líderes del grupo Juve Leo el pasado 6 de abril, después del partido de Europa League contra el Atlético de Madrid en la capital española. Bruno Carvalho, por su parte, emitió un comunicado en el que dijo que no dimitirá, razón por la que Jorge Jesús ha decidido emprender acciones legales.