El único equipo que hasta ahora había disputado las 55 ediciones de la competencia alemana bajó a Segunda División
Nada es imposible ya en la Bundesliga de Alemania. El último gran mito que presumía se ha roto en mil pedazos: tras 54 años y 261 días, Hamburgo SV, el único equipo, miembro fundador, que jamás había abandonado este circuito, desciende a Segunda División.
El Dinosaurio había luchado con uñas y dientes por no extinguirse de la máxima categoría del futbol alemán; en las temporadas de 2013-2014 y 2014-2015 luchó a muerte en los playoffs por el no descenso, saliendo airoso. Pero el meteorito decisivo, que acabó con su dominio aterrizó al fin.
El Volksparkstadion se abarrotó con fe, esperando que sus plegarias les trajesen buenas noticias. Hamburgo se olvidó de ganar en 26 de sus compromisos en el presente curso de la Bundesliga y culpable es de su destino; sin embargo en este choque ante Borussia Monchengladbach no lo hizo: victoria de 2-1.
Aaron Hunt y Lewis Holtby sacudieron las redes del Gladbach en los minutos 11 y 63; hubo respuesta por parte de Josip Drmic al 28′ para decretar la igualada momentánea.
No obstante, la ayuda divina no baño al Hamburgo. Era necesario que Colonia, el actual equipo más frágil de la Bundesliga, ya descendido, frenase al Wolfsburg para que así el destierro no se consumase, cosa que no sucedió.
En el Volkswagen Arena, los Lobos se despacharon con la cuchara grande: aplastaron 4-1 a las cabras, quedándose entonces con la posibilidad de salvarse mediante los ya mencionados playoffs por el no descenso.
El corazón del Hamburgo estaba habitado por 3 grandes compilaciones de recuerdos, su tercia de orgullos en sus 98 años de existencia bajo su actual mote: las 6 Bundesligas que han ganado hasta el momento, su glorioso campeonato en la Champions League en la 82-83 y el reloj que colgaba en su estadio indicando la cantidad de tiempo sin haber jugado en la División de Plata de Alemania.
Este último, en un momento icónico se ha detenido, se ha tenido que reiniciar, pues la mudanza del Dinosaurio a la Segunda es inevitable. El daño al alma de su gente llegó a tanto que hubo disturbios en el campo de juego: desde la grada, se lanzaron bengalas en señal de protesta.
