Zlatan Ibrahimovic, cuyo debut en la MLS dio la vuelta al mundo, vuelve a estar de actualidad. El delantero sueco, que en los últimos días había apuntado la posibilidad de volver a la selección –se retiró tras la disputa de la última Eurocopa–, además de convencer a su seleccionador, Janne Andersson, que se muestra reticente a convocar a un Ibrahimovic que no ayudó a su país en la fase de clasificación, deberá convencer a la FIFA. ¿Por qué?
Ibrahimovic alcanzó recientemente un acuerdo comercial con el corredor de apuestas Bethard, lo que infligiría una norma FIFA. Concretamente el capítulo 4 de la sección 25 del reglamento referido a la "integridad de los juegos y de las competiciones". El capítulo reza lo siguiente:
Las personas subordinadas tienen prohibido participar, directa o indirectamente, en la apuestas, juegos de azar, loterías y eventos o transacciones similares relacionados con partidos de fútbol o participar en ella de otra manera. No puede participar activa o pasivamente en compañías y organizaciones que promuevan, medien, organicen u operen dichos eventos o negocios
El secretario general de la federación sueca Hakan Sjostrand espera llegar a un acuerdo con la FIFA. "El contexto es diferente, no tiene nada que ver con las regulaciones de la FIFA y el código de ética", señaló a Aftonbladet.
