Un exjugador de la reserva del club y un árbitro en el ojo del huracán
En las últimas horas del miércoles trascendió una denuncia contra un exjugador de la reserva del equipo de fútbol Independiente de la Avellaneda, en la que se le acusa de prostituir a jóvenes de las ligas menores de ese club de la provincia de Buenos Aires Argentina.
El escándalo se destapó cuando Ariel Ruiz, un chico de 14 años, le contó al jefe del departamento de psicólogos de la pensión de Independiente, conocida como Villa Dominico, que tanto él como otros chicos eran forzados a prostituirse por un futbolista de las inferiores del club.
De acuerdo a lo manifestado por una de las víctimas, el procedimiento era el siguiente: el jugador en cuestión llevaba por las tardes a los menores desde Villa Dominico a un departamento de Palermo, donde, a cambio de dinero, mantenían relaciones sexuales con hombres mayores.
Para ello se valían de que muchos de los chicos que residen en la pensión, por ser del interior del país, tienen el visto bueno de sus padres para salir de esos predios y permanecer en la calle hasta las 20 horas.
El denunciado, de 19 años, llevaba tiempo fuera de los planes futbolísticos del Independiente. Aunque estaba por ser declarado en libertad de acción, una lesión hizo que su vínculo con el club se extendiera.
Un árbitro también está implicado
De acuerdo a lo informado por Olé, también es investigado por la justicia el árbitro Martín Bustos, quien se desempeña en divisiones inferiores y presuntamente formaría parte de esta red de prostitución de menores.
A raíz de los testimonios obtenidos, María Soledad Garibaldi, la fiscal a cargo de la investigación, solicitará una orden de captura contra Bustos, por abuso de menores y facilitación de la prostitución.
Fernando Berón, coordinador de las inferiores; Ariel Ruiz, el psicólogo con el que una de las víctimas se confesó; y Fernando Langenauer, coordinador de la pensión del equipo, se presentaron a declarar en la fiscalía durante la mañana del viernes.
