En una entrevista concedida a la revista francesa Onze Mondial, Ousmane Dembélé se confiesa después de haber reaparecido de su segunda lesión en el Barça. El extremo francés, que costó 105 millones de euros fijos en verano tras llegar del Borussia Dortmund, explica qué decisiones tomó después de romperse el tendón del bíceps femoral de la pierna izquierda en septiembre obligándole a pasar por el quirófano en Finlandia bajo la dirección de los doctores Sakari Orava, Lasse Lampainen y el azulgrana Ricard Pruna.
“Todo ha estado bien. Los primeros partidos me sirvieron de adaptación. Me lesioné pero procuré mantenerme tranquilo y sereno. Pensé que era mejor que hubiera pasado en el inicio de la temporada que durante el tramo final, que es cuando llegan los partidos importantes. He contratado un ostéopata y una cocinera. La alimentación es esencial para un jugador y tengo que cuidarme”, asegura Dembélé.
Un osteópata
Un osteópata es un profesional de la salud especializado en el tratamiento del sistema músculo-esquelético. Los osteópatas basan sus tratamientos en la teoría de que el cuerpo puede curarse a sí mismo con una combinación adecuada de técnicas manuales como el masaje y la manipulación de los músculos, articulaciones, ligamentos y tendones. Estos métodos se utilizan para llevar el cuerpo hacia la coherencia física.
Los osteópatas toman la historia clínica de cada paciente. Observan cómo funciona el cuerpo de dicho paciente cuando se sientan, cuando se levantan y cuando se acuestan, y además examinan físicamente al paciente mediante el uso de la palpación para determinar qué áreas del cuerpo están sanas y cuáles están con dolor. Un osteópata también se encarga de observar la columna vertebral y los hombros, y determina si la pelvis es simétrica.
Un sueño estar en el Barcelona
En cuanto a su primera temporada en el Barça, dice estar cumpliendo un sueño. “Soy ambidiestro. Prefiero conducir el balón con la izquierda pero para chutar prefiero utilizar el pie derecho. No soy individualista en el campo. Si no, no hubiera dado 21 asistencias durante la pasada temporada. Luché mucho para llegar donde estoy. Sabía que jugaría con Messi algún día”, señala tras haber prometido a Robert Fernández, secretario técnico azulgrana, que acabaría jugando en el Camp Nou tras rechazar el fichaje en verano de 2016 para ir del Rennes al Borussia Dortmund.