El uruguayo Edinson Cavani, envuelto en una polémica por su retraso en la vuelta tras las vacaciones de Navidad, quedó fuera de la convocatoria del Paris Saint-Germain (PSG) para disputar este miércoles el partido de Copa de la Liga, en lo que parece como una sanción implícita por su actitud.
"L'Equipe" y "Le Parisien" coinciden en considerar que la ausencia de Cavani en el Amiens-PSG de este día es una sanción que el club de la capital francesa no quiso calificar como tal para intentar cerrar la crisis sin levantar más problemas.
Emery señaló ayer que tanto él como el club hablaron con el máximo goleador del equipo (25 dianas en la temporada actual, 49 en la pasada), y también con el argentino Javier Pastore, que llegó todavía con más retraso de las vacaciones de Navidad (cinco días, frente a los dos del uruguayo).
Emery indicó que tras ese diálogo se iba a tomar una "decisión" sobre si merecen una sanción, "pero eso son cosas que se quedan en el interior del club", señalo.
Según "L'Equipe", la dirección optó por castigar a los dos jugadores reteniéndoles la parte del salario correspondiente a los días que uno y otro faltaron a los entrenamientos, a diferencia del resto de sus compañeros.
Por lo demás, Cavani se incorporó ayer al resto del grupo en los entrenamientos. Desde su vuelta de Uruguay a comienzos de año había tenido que hacerlos por separado, lo que hace pensar que podría volver a jugar en el siguiente encuentro del PSG, el próximo domingo en Nantes.
Pastore, que mantiene un pulso particular con la dirección del club -del que se quiere ir-, continúa por su parte un trabajo individualizado, separado del resto.
Tanto Cavani como Pastore justificaron su tardanza para reincorporarse a los entrenamientos por problemas personales, y alegaron que habían prevenido al equipo.