''El fútbol nos hace ver guapos''
El ex futbolista italiano de 35 años, Antonio Cassano reconoció arrepentirse de su actitud cuando llegó al Real Madrid entre el 206 y 2007 así como reconoció el impacto del fútbol en su vida, que además hace milagros, porque "nos hace vernos guapos".
El díscolo ex jugador se retiró del fútbol profesional en el 2017.
Aquí presentamos una nota reproducida por diario AS tras una entrevista que Cassano brindó al Canal Football Club de Canal+ Francia.
En sus declaraciones, Talentino lamenta el comportamiento que tuvo en el Real Madrid y que le condujo a abandonar la disciplina del conjunto blanco. "De lo que más me arrepiento es de lo del Real Madrid. Allí estaba en el mejor equipo de la historia. Habría podido quedarme allí mucho tiempo y ganar mucho. Habría podido hacer historia en el fútbol. En cambio, seguí mi instinto y cometí errores. Si un entrenador que no me hacía jugar le insultaba".
El jugador italiano lamenta cómo desperdició el privilegio de jugar junto a los mejores: "Mi historia en el Real Madrid comenzó bien. Cuando el Real Madrid me fichó fue para sustituir a Figo y Owen, dos Balones de Oro. Eso quería decir que yo era alguien importante. Un jugador de 23 años. Allí conocí a dos de los mejores jugadores: Zidane y Ronaldo, El Fenómeno. Muchos jugadores de entonces habrían pagado por jugar en aquel Madrid. Yo a veces no jugaba y me quejaba".
Cassano no tuvo reparos en reconocer que era una fuente de conflictos en el vestuario: "Yo me enfadaba con todo el mundo por nada. Un día Capello me quitó y yo me volví loco en el vestuario, le insulté en castellano e italiano. Sin razón. Después de un año discutiendo con todo el mundo, me fui".
Su difícil infancia: "Pasé hambre"
Antes de llegar a la élite, las penurias marcaron la infancia de Cassano, quien desde muy pequeño se buscó la vida con el fútbol: "Hasta los 17 años pasé hambre, en el verdadero sentido de la palabra. Mi madre no trabajaba, era ama de casa y ganábamos 3.000 ó 4.000 liras (entre 1,55 y 2,07 euros al cambio) con las que teníamos que comer. Yo jugaba en la calle y me iba con quien me diera mil liras más o menos porque era el más fuerte de todos. No tenía dinero, nunca lo había visto en mi vida. Decía: 'elígeme, te hago ganar'. Y todos los días jugaba en la calle para ganar algo. Mi gran oportunidad siempre ha sido el fútbol. En aquella época, 2.000 liras más o menos para mí hacían una gran diferencia".
El fútbol le cambió la vida en todos los sentidos al exinternacional con la Azzurra, que recuerda su debut con el Bari en la Serie A y su segundo partido, en el que marcó al Inter: "Tenía 17 años. Era el partido que podía cambiar mi vida en todos los aspectos. Hacerme rico, famoso y guapo (risas). El fútbol nos hace guapos a todos. ¿Si obra milagros? Sí, conmigo hizo tantos...", bromeó.
Fuente: Diario AS
