El argentino Marcelo Bielsa y el Lille, el club que le despojó de sus funciones de entrenador la pasada semana, se han enzarzado en una batalla jurídica para fijar su indemnización de despido.
El club del norte de Francia publicó hoy un comunicado en el que salió al paso de las declaraciones la víspera del abogado del técnico en las que aseguraba que su despido había sido improcedente.
Bielsa, a través de su representante legal, aseguró que acudiría a la Comisión Jurídica de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para dejar constancia de la ruptura de su contrato, después de que el pasado miércoles el club le comunicara que no seguía al frente del primer equipo.
En particular, el abogado ponía el acento en el hecho de que Bielsa no había sido convocado previamente para comunicarle su despido, tal y como establece la legislación laboral francesa.
Esa circunstancia permitía al técnico argentino reclamar una indemnización superior, que sería fijada por un tribunal de lo laboral.
Sin embargo, el Lille puntualizó hoy que ha citado a Bielsa para la reunión legal de despido mañana, aunque reconoció que mientras dura el procedimiento de ruptura de contrato apartó al entrenador "de forma preventiva" del puesto.
El despido de Bielsa parece destinado a resolverse en los tribunales.
El entrenador argentino dejó el equipo en la penúltima posición de la tabla, tras haber sido elegido por el propietario del club, el empresario hispano-luxemburgués Gerard López, para liderar un nuevo proyecto con elevadas ambiciones.
Su puesto ha sido ocupado de forma interina por una comisión técnica, a la espera de que se nombre un sustituto.
