El nuevo estadio Santiago Bernabéu está en serio peligro antes incluso de que empiecen las obras. La empresa Mudabala (actual nombre de International Petroleum Investment Company o IPIC), dueña de Cepsa y que iba a aportar el capital, ha comunicado a Florentino Pérez que rompen el acuerdo que habían suscrito, según avanzó ‘El Confidencial’.
Sin la financiación de 400 millones que iba a aportar el fondo abudabí, las obras, contratadas y confirmadas en octubre de 2014, van a sufrir un serio retraso y, quizá, su cancelación total.
LAS CAUSAS
‘El Confidencial’ asegura que la compañía de los Emiratos ha activado una cláusula del contrato por la cual podía renunciar a la financiación del nuevo Bernabéu si se producía alguna modificación sobre el proyecto.
Dichos cambios han venido dados por la sentencia del Tribunal Supremo, que aceptó un recurso de Ecologistas en Acción contra la permuta de terrenos que habían acordado el Ayuntamiento de Madrid y el club. Esto obligó a Florentino a renunciar a elementos como el hotel o la zona comercial en suelo público, con los que pretendía obtener un retorno económico.
Sin embargo, en ‘El País’, apuntan a otro motivo: a Mudabala le ha dado miedo adelantar esos 400 millones de euros. El precio del petróleo, fuente fundamental de riqueza del fondo, ha tocado mínimos, y sus arcas han quedado seriamente tocadas. Además, Khadem Al Qubaisi, ex presidente de IPIC, ha sido detenido y está involucrado en operaciones contra el fraude de capitales.
Fuente: sportyou.es
