La cancha del Estadio Azteca está afectado por la cantidad lluvia de los últimos días
La rotación de jugadores, la utilización de elementos fuera de su posición habitual y la confirmación de que no tiene como prioridad la utilización de laterales naturales han sido los principales argumentos de sus detractores contra el técnico colombiano de México, Juan Carlos Osorio que hoy enfrentará a Panamá a las 7:30 p.m. en una cancha del Estadio Azteca tapada con una lona y que se ha visto inundada en estos días por la gran cantidad de lluvia caída.
Desde Copa Confederaciones, la falta de laterales derivó en varios problemas, pues además de que por el lado derecho tuvo como primera opción a Carlos Salcedo y a Diego Reyes, ambos se lesionaron.
La improvisación de Oswaldo Alanís, con poco éxito, y la utilización de Luis Reyes como última alternativa, esa sí acertada, le significaron varios dolores (y más críticas) al colombiano, que en esta convocatoria prescindió de laterales en la convocatoria original, si bien luego incluyó al Dedos López por las bajas de Erick Gutiérrez y Elías Hernández.
De cualquier modo, Osorio deberá improvisar, pues tampoco convocó a Miguel Layún porque se esperaba cambiaría de equipo, aunque finalmente se quedará en el Porto.
Sin embargo, aun cuando tendrá al Dedos, el DT contempla a Diego Reyes, Edson Álvarez o Jesús Dueñas, mientras que por izquierda sería Jesús Gallardo o Andrés Guardado, pese a que el primero de estos es más volante que defensor y a que el Principito es más mediocampista que zaguero.
"Para jugar por derecha, tenemos tres alternativas: Edson Álvarez, que fue la mayor y grata revelación, quedamos muy y gratamente impresionados, al igual que Diego Reyes, quien lo hizo en la Copa Confederaciones. Creemos que hay cuatro o cinco muy buenos marcadores", dijo Osorio hace unos días.
Pero la falta de laterales que le generó problemas en Confederaciones también ocurrió en la Oro, donde quienes ocuparon esa posición fueron el mencionado Álvarez y Luis Reyes, este último hasta después de convencer en el último juego del torneo en Rusia.
