El entrenador costarricense, Henry Duarte, expuso este jueves la evolución de la Selección de Futbol de Nicaragua durante el II Seminario Internacional de Periodismo Deportivo impartido por la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua (ACDN).
El técnico de la selección mayor nicaragüense habló de los logros conseguido durante los últimos dos años, las situaciones adversas que enfrentaron y que superaron con esfuerzo y sacrificio.
“Hacíamos pesas con bloques ¡Por Dios! Lo hemos hecho y lo digo. Hoy en día el Comité Olímpico nos prestas las pesas. Nada ganábamos con llorar que no teníamos condiciones, teníamos que buscar soluciones. Fuimos a una universidad y nos prestó el campo. Hemos pasado hambre y sueño. Ahora estamos en un hotel con todas las condiciones. Vamos recogiendo los frutos”, manifestó Duarte frente a periodistas nacionales y de Costa Rica, El Salvador y Guatemala.
El seleccionador señaló que encontró virginidad táctica en los futbolistas y que eso le permitió trabajar bien porque empezó de cero. “No tenían la mente con babosadas como en Costa Rica. Llegaron limpios intentando aprender, no estaban maleados. En Costa Rica convencer al jugador es difícil porque desde pequeño crece con la parte táctica y cree que todo lo sabe. La ventaja aquí que el jugador está abierto a aprender y mejorar, eso nos ha ayudado muchísimo. Quieren cambiar, en los otros países de Centroamérica están en una zona de confort. Ese problema lo hemos vuelto una ventaja”, apuntó.
Consultado por las cualidades o virtudes del jugador nicaragüense, Duarte destacó dos aspectos. “Nicaragua tiene una virtud y es que el jugador es muy veloz, muy explosivo por idiosincrasia, eso en el nicaragüense se ve en su temperamento. Hay gente que de un momento a otro puede cometer la estupidez más grande de un ser humano. Así es el futbolista. Tengo jugadores muy explosivos y rápidos. Carlos Chavarría y Juan Barrera son así (explosivo, veloces) con balón dominado”, manifestó.
También el técnico añadió que el jugador nacional tiene amor propio y saca lo mejor cuando le tocan el orgullo. “Eso se ha perdido en Costa Rica, El Salvador o Guatemala”, añadió.
Fuente: La Prensa Nicaragua
