El entrenador español, Pep Guardiola, brindó unas declaraciones en donde mostró su desacuerdo con la nueva norma de la Premier League de Inglaterra que castiga los piscinazos.
La FA revisará posibles simulaciones en jugadas que hayan acabado en penalti, tarjeta roja para el rival o gol y se aplicará al infractor un castigo de dos partidos de sanción.
“No es necesaria. Todos cometemos errores. ¿Se revisarán también los errores de los árbitros? Creo que hay cosas más importantes que mejorar. Tarde o temprano, los árbitros podrán ayudarse de la tecnología y será justo para cometer menos errores. No es que los árbitros tengan que mejorar, sino que ahora el fútbol es más rápido y no llegan. No pasa solo aquí, en España o Italia también cometen errores. Antes, los jugadores corrían seis kilómetros, ahora 11 o 12”, declaró el técnico del Manchester City en rueda de prensa.
El estratega reconoció su decepción por no haber logrado que el equipo pelear hasta el final de la temporada por el título de la Premier League, pero su resumen del año no fue pesimista: “Me lo he pasado muy bien. Estoy muy contento de estar aquí. Hemos perdido muchos puntos en casa, pero todavía tenemos un partido más que pelear para poder meternos en la Champions League. Es un partido crucial, una final, y está en nuestras manos”.
Además, valoró la posible vinculación al fútbol de Philipp Lahm y Xabi Alonso tras sus retiradas: “Me sorprendería si Lahm acaba de entrenador, porque él me decía que de ninguna manera lo haría, aunque espero que se quede en el mundo del fútbol porque el fútbol le necesita. Xabi Alonso seguro que será un gran entrenador, no os podéis imaginar lo buenos que son”.
