La gran campaña de la Juventus de Turín empieza a confirmarse en títulos. Este miércoles la ‘Vecchia Signora’ venció 2-0 a Lazio en la final de la Copa de Italia y se coronó campeón de la competición.
Los dirigidos por Massimiliano Allegri manejaron la final en el Estadio Olímpico de Roma con oficio. Apretaron cuando debían y, luego, jugaron sin prisa. Luego de unos primeros minutos de posesión repartida, Keita Balde asustó a la Juve en un contragolpe: su remate bajo dio en el primer palo que había dejado descubierto el portero Neto, quien ocupó el lugar que habitualmente defiende Gianluigi Buffon. Del otro lado, Gonzalo Higuaín sacudió con potencia desde afuera del área, pero Thomas Strakosha estuvo atento para tapar.
A partir de ahí, el conjunto bianconeri reaccionó y escribió un monólogo. A los 11' llegó el primero gracias a un centro largo y alto que llegó desde la izquierda por intermedio de Alex Sandro. El balón derivó en Dani Alves, quien dentro del área y como venía, lo direccionó cruzado para vencer al arquero.
A los 25', la Juve dio un nuevo golpe por la vída de la pelota parada: centro a media altura desde el córner izquierdo de Paulo Dybala, que desvió Alex Sandro y vio aparecer a Leonardo Bonucci en el área chica. Con un toquecito de zurda, el defensor la mandó al fondo del arco y desató un nuevo festejo.
Los de Turín casi no pasaron sobresaltos -salvo un cabezazo que mandó afuera Ciro Immobile- en lo que restó de la primera mitad y en el complemento se dedicaron a aguantar. Por necesidad y urgencia, el cuadro biancocelesti fue al frente y tuvo sus oportunidades a través de Dusan Basta y Balde, uno de ellos que obligó a una gran muestra de reflejos de Neto.
El descuento jamás llegó, la Vecchia Signora contó con chances de ampliar por intermedio de Higuaín y Mandzukic, aunque tampoco lo consiguió.
Juventus firmó su tricampeonato y 12ª corona en la Copa Italia, para escaparse en la cima de la tabla histórica: ahora aventaja a Roma por tres títulos. Hizo pesar su favoritismo, cumplió con el pronóstico y ya piensa en sus otras dos metas: la Serie A y la UEFA Champions League.