Polémica en Brasil. El guardameta brasileño Bruno Fernandes de 32 años , liberado tras cumplir parcialmente la condena de 23 años de cárcel que cumplía por el asesinato de su amante en 2010, ha sido presentado por su nuevo equipo, el Boa Esporte Clube, de la Serie B brasileña.
El portero ha declarado estar “muy feliz con esta oportunidad” y estar “preparado desde hace bastante tiempo” para volver a jugar, sin preocuparle “lo que la gente diga por ahí”.
Puesto en libertad en febrero
Fernandes abandonó el pasado 24 de febrero la prisión de la ciudad de Belo Horizonte en la que estaba preso desde hacía seis años y siete meses, después de comprometerse a presentarse ante la Justicia cada vez que sea convocado.
El futbolista se benefició de una medida concedida por el magistrado Marco Aurelio Melo, quién alegó que el condenado está esperando hace más de seis años a que un tribunal de segunda instancia confirme o revoque su condena.
Bruno, preso desde agosto de 2010, fue condenado por un juez de primera instancia por homicidio calificado, secuestro y ocultación de cadáver. El cuerpo de Eliza Samudio, desaparecida cuando tenía 25 años, no ha sido encontrado.
Ídolo y capitán del Flamengo
El futbolista, que en la época era portero, capitán y uno de los ídolos del Flamengo, también fue condenado en otro proceso por su responsabilidad en la retención ilegal y lesión corporal de Samudio, de la que era amante y con la que tuvo un hijo.
La modelo había presentado una demanda ante una comisaría de policía de Río de Janeiro en la que acusó al futbolista de haberla secuestrado, agredido y amenazado con matarla.
La joven desapareció poco después y el portero fue arrestado después de que un primo suyo, entonces con 17 años, admitiera haberla secuestrado por orden de Bruno para llevarla hasta la residencia del futbolista en las afueras de Belo Horizonte. Añadió que la joven fue asesinada por un expolicía contratado por el futbolista, y que el homicida descuartizó a la mujer y sus restos fueron comidos por varios perros.
El expolicía Marcos Aparecido fue condenado posteriormente a 22 años de prisión por ser el asesino material de la amante de Bruno.
