Thomas Müller no es partidario del actual formato establecido por la FIFA en la fase de clasificación para el Mundial. El jugador del Bayern de Múnich se queja, por ejemplo, de que Alemania tuviera que medirse a San Marino.
“Jugar contra San Marino no tiene nada que ver con el fútbol profesional. No entiendo qué sentido tiene jugar partidos así y más aún con calendarios tan apretados. Entiendo que para ellos sea especial jugar contra el campeón del mundo y que tienen que defender duro. Sin embargo, y precisamente por esta razón, me pregunto si estos partidos no son un riesgo innecesario”, recoge ‘Daily Mail’.
Alemania se impuso 0-8 a San Marino y es líder indiscutible del grupo A con pleno de victorias tras haber superado también a Irlanda del Norte (2-0), República Checa (3-0) y Noruega (0-3).
SAN MARINO RESPONDE
El director de comunicación de San Marino, Alan Gasperoni, respondió a Muller con una lista de razones por las que este partido sí mereció la pena y que recoge el ‘Mirror’:
-“Sirvió para demostrar que ni siquiera con equipos tan malos como el nuestro eres capaz de meter.
-Sirvió para dejar claro a tus dirigentes, incluidos Franz Beckenbauer y Karl-Heinz Rummenigge, que el fútbol no es de su propiedad sino de todos los que lo aman, entre los que estamos nosotros guste o no.
-Sirvió para confirmar que los alemanes nunca cambiarán y que la historia os ha enseñado que el ‘bullying’ no siempre es garantía de victoria.
-Sirvió para que tu Federación -y también la nuestra- recaude dinero por los derechos de imagen con los que, además de pagar tus posibles problemas, puedan construir campos para los niños.
-Sirvió para hacer feliz a la gente de San Marino al recordar que tenemos una verdadera selección.
-Sirvió para darme cuenta de que, aunque lleves uno de los kits de Adidas más bonitos, siempre serás el que se pone calcetines blancos con las chanclas”.
El técnico de San Marino, Pierangelo Manzaroli, también contestó a Muller: “Lo importante en el fútbol es el respeto. Es lógico que los campeones del mundo nos metan ocho, pero aún así tiene que haber respeto, y ahí han fallado”.