Alemania no tuvo piedad. Se esperaba un partido tranquilo en su visita a San Marino por la cuarta fecha de las Eliminatorias Europeas, y más de alguno pensó que jugarían con el freno de mano puesto, pero la escuadra de Joachim Löw no tuvo piedad para imponerse por 8-0.
La gran figura del partido fue el joven Serge Gnabry, del Werder Bremen, quien se matriculó con tres tantos, a los 9', 58' y 76'.
Khedira fue el encargado de abrir la cuenta a los 7' y Hector celebró un doblete a los 32' y 65'. Un autogol de Stefanelli aortó el séptimo a los 82' y Volland cerró la paliza en los 86'.
Con esta espectacular actuación, Alemania se consolida en el primer puesto del Grupo C con 12 puntos - campaña perfecta - donde han logrado 16 goles en cuatro partidos, sin recibir aún tantos.