Llegar a ser contratado por los grandes clubes del mundo es el sueño y el objetivo de todos los jugadores de fútbol.
Pero, llegar a la cima de los clubes no significa ser feliz. Es el caso de de Jasper Cillessen, portero holandés que llegó al Barcelona de España para tapar el hueco que dejó Claudio Bravo.
El portero que defendió el arco de Holanda en Brasil 2014, solo jugó un partido con la camiseta del Barcelona desde su llegada, lo que lo llevó a tener una terapia psicológica con el profesional del club, Marco Hoogerlandm, para afrontar su suplencia.
Jasper Cillessen dijo que junto a Hoogerlandm va a encontrar el enfoque necesario para poder avanzar los pasos precisos y llegar a ser el portero titular del Barcelona.
“No vengo a hacer turismo sino a rendir. Vi la Sagrada Familia hace 16 años y no estaba acabada. Creo que aún no lo está. Cuando sea titular del Barça la visitaré y haré unas fotos”, aseguró el guardameta.
Todos recuerdan el partido de Holanda ante Costa Rica en el mundial de 2014 en el que Jasper Cillessen fue reemplazado por Tim Krul, portero que le dio la clasificación a la Naranja Mecánica a semifinales del certamen.