Hace unos años, cuando Cristiano Ronaldo jugaba en el Manchester United, tuvo un incidente con el exárbitro Howard Webb durante un derbi contra el Manchester City en la Premier League.
Webb confesó en una entrevista al diario inglés Daily Mirror, que le tembló el pulso para expulsar al portugués justo en el momento que él parecía que era correcto. Y hoy en día se cuestiona si en realidad tomó o no la decisión justa.
Durante el derbi Manchester United ante Manchester City, el ahora jugador y estrella del Real Madrid hizo una fea barrida a un rival y fue cuando Cristiano saludó la decisión de Webb con un aplauso sarcástico.
Esto puso a Webb, quien ahora tiene 45 años y que dejó a sus espaldas más de mil partidos dirigidos, en una difícil situación. La FA, en su momento, tomó medidas drásticas contra la disidencia del árbitro, y declaró con todos los derechos, que Cristiano debeió haber recibido una segunda amarilla.
Sin embargo, Webb decidió, en aquel momento, dejar pasar la situación de un incidente que hoy en día todavía no se siente seguro si fue correcto o no.
"Yo estaba con un poco de dilema. ¿Debo expulsarlon por esta muestra de falta de respeto, o lo puedo manejar?", se preguntó.
"Cuando se va a enviar a alguien fuera, es un gran movimiento. Cuando es por algo que no es una situación relacionada con el fútbol, no es una mala decisión. Pero tampoco es un delito retenerlo, sabiendo que no era algo del juego en sí. Tomé la decisión de advertirle y hasta la fecha no estoy seguro de si eso era lo que hay que hacer. Tal vez debería haber hecho algo más y decir: no, esto no es aceptable.
FINAL DEL MUNDIAL 2010
Howard Webb sacó un libro, El Hombre en el Medio, que The Times está publicando por entregas.
En una de esas entregas, el excolegiado inglés detalla lo sucedido entre españoles y holandeses en aquel 11 de julio de 2010 y desvela por qué no expulsó a De Jong tras su espeluznante entrada al pecho a Xabi Alonso.
“Xabi Alonso cabeceó un balón hacia David Villa y en ese momento De Jong chocó contra él. En ese momento, yo estaba justo detrás de Alonso, a diez yardas, por lo que no vi el punto exacto de impacto. Yo sabía que había sido una entrada a destiempo, contundente y merecedora de sanción. Ninguno de mis ayudantes me dijo nada por lo que mostré una amarilla por aquello que vi con mis ojos. Con la mano en el corazón, nunca se me pasó por la cabeza que era roja. Estaba convencido de que era tarjeta amarilla”, señaló Webb.
Tampoco le extrañó la reacción de los españoles cuando mostró la amarilla. Encontró una explicación: “Cuando saqué la amarilla vi una furiosa reacción de los españoles, tanto dentro como fuera del campo. Yo pensaba que estaban cabreados por la dureza física que estaban mostrando los holandeses. Incluso pensé que era porque no había aplicado la ley de la ventaja en el cabezazo de Xabi hacia Villa”.
Howard Webb insiste en que si hubiera visto clara la jugada, no hubiera dudado en expulsar a De Jong. El excolegiado inglés asegura que nunca se ha escondido en grandes escenarios: “Nunca me he sentido intimidado por el escenario ni por el partido, y nunca he sentido ninguna presión por la FIFA para que no echara a jugadores”.
El inglés confiesa que fue durante el descanso cuando comenzó a percatarse de que había fallado: “No fue hasta el medio tiempo cuando me di cuenta de que a entrada de De Jong podía haber sido roja. Me sentí muy fastidiado. Creí que había fallado en una final de un Mundial. ¡Qué puta pesadilla! Volví al campo con la cabeza dándome golpes y el corazón palpitando fuerte”. España acabó ganando el encuentro 1-0 con aquel gol de Iniesta.
