El capitán argentino Lionel Messi volvió a terminar una final con las manos vacías después del Mundial de Brasil, ante Alemania, y la de la Copa América del año pasado, ante La Roja. Para ponerle más drama este domingo falló en la tanda de penales.
Su imagen llorando desconsoladamente después de otra derrota, nuevamente ante Chile, dio la vuelta al mundo.