Sin duda alguna, la final de la Copa del Mundo, es el partido del que todo jugador quiere formar parte; sin embargo tanto lesiones como sanciones han dejado fuera a numerosas estrellas del partido más importante del mundo futbolístico.
Pelé (Brasil, 1962)
Una lesión muscular frente a Checoslovaquia en el segundo partido del torneo chileno, le apartó de los terrenos de juego para lo que quedaba del que era su segundo Mundial. La Verdeamarelha pudo sobreponerse a la pérdida de su máxima figura y, con Garrincha y un imperial Amarildo, acabó logrando su segundo entorchado consecutivo.
Pumpido y Caniggia (Argentina, 1990)
La portería de la Albiceleste en Italia 1990 tenía tallado el nombre de Nery Pumpido. El guardameta titular en la victoria de 1986 estaba dispuesto a serlo también cuatro años después.
Sin embargo, en el segundo partido de la fase de grupos, frente a la URSS, su rodilla chocó con el defensor Olarticoechea y se fracturó la tibia y el peroné. El arquero suplente, Sergio Goycochea, le sustituyó en ese partido, y a lo largo del torneo, y acabó siendo decisivo en la obtención del subcampeonato argentino. Claudio Caniggia, figura argentina del Mundial, se perdió la final del torneo por acumulación de tarjetas amarillas.
Costacurta y Tassotti (Italia, 1994) y Leonardo (Brasil, 1994)
La final de los Estados Unidos no pudo contar con tres importantes futbolistas. El brasileño Leonardo se fue del Mundial en la ronda de octavos, al ser expulsado y, posteriormente, sancionado durante cuatro partidos por un codazo en la cara del estadounidense Tab Ramos.
Una ronda más aguantó el italiano Tassotti, que fue sancionado con siete partidos por un codazo al español Luis Enrique. Costacurta, por su parte, no pudo disputar la final por acumulación de tarjetas amarillas.
Laurent Blanc (Francia, 1998)
El por entonces central del Olympique de Marsella, no pudo disputar la final su Mundial por expulsión frente a Croacia en semifinales. Barthez se quedó sin beso en la calva, pero Francia consiguió golear a Brasil y lograr su único título mundial.
Michael Ballack (Alemania, 2002)
El centrocampista teutón no pudo disputar la final frente a Brasil por ver una tarjeta amarilla frente a la anfitriona Corea del Sur en semifinales. El futbolista más determinante de Alemania se perdió una final que fue dominada de principio a fin por Brasil.
Alessandro Nesta (Italia, 2006)
Una lesión privó a la selección transalpina de contar con uno de los mejores componentes del combinado. Pese a su ausencia, lograron su cuarto título mundial al derrotar a Francia en los penaltis.
