La convocatoria de Carlos Sánchez a la Copa América Centenario ha generado un problema entre Monterrey y la Asociación Uruguaya de Futbol (AUF), que el propio futbolista decidió culminar tomando la decisión, la cual a su vez trajo consecuencias inesperadas.
El sitio deportivo uruguayo ovación publicó que el mediocampista viajó a su país “amenazado de muerte” por los aficionados rayados, quienes están furiosos porque el jugador se ausentará en las finales de la Liga MX ante Pachuca, este jueves y el próximo domingo.
El club había prohibido mediante un comunicado la salida de Sánchez del país, hasta que la Conmebol tomase una determinación sobre el asunto: “El Club de Futbol Monterrey Rayados, con el respaldo de la Federación Mexicana de Fútbol, le prohíbe a su jugador Carlos Andrés Sánchez Arcosa que abandone el país”.
Sin embargo, una resolución anterior de la Conmebol y la Concacaf, confederaciones que rigen el futbol en América, subraya que todos los futbolistas están liberados de los compromisos con sus clubes a partir del 23 de mayo. Por lo que Sánchez actuó correctamente.
Una situación similar atraviesa el colombiano Edwin Cardona, también jugador de Monterrey, pero en su caso la Federación Colombiana de Fútbol avaló su estancia en México para disputar las finales, y luego sumarse a los entrenamientos del combinado cafetero.
