El portero español, Iker Casillas, ha batido un récord negativo con su actual equipo el Porto ya que ha sido el guardameta más goleado de los últimos quince años.
Los datos no dejan ningún lugar a la duda. El Oporto, que ha acabado tercero en la liga portuguesa a 13 puntos del Sporting de Lisboa, segundo clasificado y a 15 del Benfica que ha sido el vencedor de la competición ha encajado esta temporada 30 goles, el peor dato de las últimas quince temporadas. Además, Casillas ha sido, junto con otros dos porteros en los últimos 42 años, el único en llegar a esa cifra. Es más, el Oporto ha encajado ocho goles más que el primer clasificado y nueve más que el segundo.
Casillas ha realizado así, una de las peores temporadas de su carrera. Una temporada que ha venido marcada no sólo por las malas sensaciones que ha dejado el portero bajo los palos, con cantadas estrepitosas indignas de un portero del nivel que se le supone y con una afición que le ha pitado en más de un partido.
Muchos de sus errores han sido los culpables de que el Oporto perdiera partidos que tenía encarrilados o en disposición de no perder hasta que, Manos de Manteiga (Manos de mantequilla), como le ha bautizado la prensa portuguesa, los echara al traste de la peor manera con sus actuaciones ante equipos como el Dinamo de Kiev, en la que una mano blanda y suave apenas sirvió para frenar un intento de vaselina y que permitió que el balón entrara mansamente en su portería, el Vitoria de Guimaráes, en la que un balón aéreo sin peligro aparente se convirtió en una cesión al delantero rival, o ante el Braga, en el que inexplicablemente salió más de 20 metros fuera del área para intentar despejar un balón sin peligro al que ni tan siquiera consiguió rozar.
Además Iker Casillas ha acabado la temporada con 28 goles encajados en 32 partidos lo que da un coeficiente de gol encajado por partido de 0,875 goles por encuentro, un resultado demasiado elevado para un equipo que aspira a ganar su liga y a llegar a la fase final de Champions.
De todos modos eso no es ningún tipo de impedimento para que el seleccionador nacional, Vicente del Bosque, vuelva a confiar en él para la fase final de la Eurocopa, ya que ha sido de nuevo uno de los elegidos, junto a De Gea, para ocupar la portería de la Selección Española de Fútbol.