El futbolista de Nueva Chicago, Rodrigo Espíndola murió este jueves de noche luego de recibir un disparo en el tórax, al tratar de detener a unos delincuentes que ingresaron a robar a su casa.
Espíndola, de 26 años, salió de su casa a guardar el auto, frente a su domicilio, y al ver que un grupo de delincuentes ingresó a su casa a robar, corrió hasta el lugar. Allí, los malhechores le dispararon en el pecho, delante de su esposa y su hijo.
Pese a que logró llegar con vida al hospital Santamarina, falleció cuando era intervenido.
El presidente del club, Daniel Ferreiro, fue quien divulgó la noticia a través de las redes sociales.
Espíndola, además de Nueva Chicago, jugó en Racing y en Chacarita