Cuando está por terminar la temporada, el volante experimentado del Bayern Múnich, Arjen Robben, hizo un análisis de lo que fue su desempeño a lo largo de la presente campaña y no fue el mejor. Las lesiones perjudicaron mucho al futbolista y el holandés confesó que no ha sido su año.
“Estoy feliz porque 2015 termina. Fue un año de mierda para mí. Me lesioné de manera tonta en marzo y desde entonces no volví a sentirme bien”, declaró el extremo a la cadena holandesa NOS. “Por suerte todo pasó y estaré listo para cuando vuelva la Bundesliga tras el parón invernal”, añadió.
La noticia del adiós de Pep Guardiola no sentó tampoco nada bien a Robben, que lamenta su marcha. “Es una verdadera lástima. Estoy un poco decepcionado al ver que se va. Ahora tocará empezar de nuevo como pasa cada vez que hay un nuevo entrenador”, confesó el holandés, que sin embargo prefiere no hablar de Ancelotti hasta que acabe la temporada. “Aún es pronto para ello. Estamos a media temporada y aún queda mucho por ganar", concluyó.
